Spotify genera a la industria 18 dólares por usuario mientras que YouTube apenas paga 1 dólar, según estimaciones de Federación Internacional de la Industria Discográfica (IFPI, por su sigla en inglés).
Para la industria musical, YouTube es el servicio de streaming más usado en el mundo pero el que menos paga si se le compara con Spotify, Deezer o Apple Music.
“Es la plataforma más vista y creo que ahora que tenemos muchas legales hay que buscar un pago justo para todos”, señaló en entrevista Gilda González, directora de la Asociación Mexicana de Productores de Fonogramas (Amprofon) que reúne a los sellos discográficos más importantes en México.
Otro problema que ve Amprofon con YouTube es que no tienen un candado de seguridad para que el video o la canción no se pueda convertir en MP3 y se baje con programas como You Tube MP3 o Toutube.
“Hoy lo que está causando un gran prejuicio son aquellos sitios de internet que convierten el video de YouTube en sonido y esto significa un download perdido para la industria y causa mucho daño”, explicó la directora de Amprofon.
Recientemente, Nelly Furtado se sumó a una larga lista de cantantes que están en desacuerdo con lo que paga YouTube y escribió una carta en The Guardian donde exigía un pago justo y mayor protección a los derechos de autor.
“El consumo de la música se ha disparado a niveles récord, sin embargo, los que se le paga a los autores y a la industria no son los correctos”.
Frances Moore, CEO de la Federación Internacional de la Industria Discográfica la apoyó.
“YouTube afirma que ha pagado una gran suma a la industria de la música pero loa realidad es que es una pequeña cifra que no rebasa el 2 por ciento de los ingresos de la industria desde 2008”.
YouTube se defiende
“Ninguna otra plataforma paga tanto a los creadores como nosotros”, señaló mediante un comunicado Christopher Muller, Head of Youtube International Music Partnerships ante las críticas.
Y dio a conocer que el 50% de los ingresos que recibe la industria de la música por derechos de autor es por contenido que suben los usuarios al utilizar una canción “famosa” en algún video de su autoría.
Y niegan la comparación con otras plataformas como Spotify o Deezer que cobran una suscripción por el servicio.
Ady Harley, director de Music Publishing YouTube y Google Play para América Latina dijo que “tenemos acuerdos con todas las disqueras “Majors” y con más de 150 disqueras mexicanas que nos están entregando su catálogo y se han pagado más de mil millones de dólares de derechos de autor”.
Mientras que John Farrell, director de YouTube Latinoamérica señaló: “YouTube es la plataforma tecnológica más avanzada que ha invertido mucho dinero y dado las herramientas para poder rastrear y monetizar hasta lo que en un momento se ve como piratería y que son las versiones que hacen los fans”.
Hace unos días, YouTube y la Sociedad de Autores y Compositores de México (SACM) y Editores Mexicanos de Música (EMMAC) firmaron un convenio para el pago de derechos que dejó contentos a las dos partes.
Pero para Armando Manzanero, el tema del pago de YouTube con la industria musical no es problema de la SACM.
“Ése no es nuestro problema, a mí, lo mío y que la industria arregle eso con ellos”.