El ginecólogo italiano Severino Antinori, conocido por haber ayudado en los 90 a una mujer de 63 años a dar a luz y por sus proyectos de clonación humana, fue arrestado hoy acusado de extraer tres óvulos a una empleada contra su voluntad.
Según confirmó el cuerpo de carabineros, Antinori, de 71 años, enfrenta las acusaciones de robo y lesiones agravadas, por lo que fue suspendido de la profesión por un año.
El médico fue detenido en Roma en ejecución de una ordenanza de un juez de Milán, que lo acusó de haber extraído tres óvulos por la fuerza a una española de 24 años que trabajaba como enfermera en su clínica.
La mujer, a la que Antinori le quitó su celular para evitar que pidiera ayuda, se despertó tras la anestesia y logró usar un teléfono de la clínica para llamar a la policía.
Con un título de enfermera conseguido en España, la chica habría conocido al ginecólogo en Milán, donde él le habría ofrecido contratarla a prueba por un mes.
De acuerdo con los medios, la muchacha ha regresado a Málaga, donde reside su familia. Los hechos ocurrieron en abril pasado en la clínica Matris de Milán, que fue clausurada.
Los carabineros confiscaron los documentos con los que la mujer supuestamente dio su permiso para la extracción de los óvulos, pero la paciente aseguró que su firma fue falsificada, lo que los investigadores consideraron cierto.
Asimismo, decomisaron seis embriones aparentemente obtenidos con los óvulos de la víctima, que denunció haber sido inmovilizada y anestesiada por la fuerza.
Antonori saltó a la fama mundial en 1994, luego de haber sometido a terapia hormonal a una mujer de 63 años para que pudiera quedar embarazada y dar a luz.
En 2002, el ginecólogo anunció su proyecto de clonación humana, prohibida por la ley, aunque sin que se conocieran después los resultados de sus experimentos.