El Banco Mundial bajó el martes su pronóstico de actividad económica para América Latina a una contracción de un 1,3 por ciento, más profunda que el 0,9 por ciento que había previsto en enero, por un desempeño aún más débil de Brasil.
El organismo destacó que, tras la contracción de un 0,7 por ciento del Producto Interno Bruto en 2015, será la primera vez en más de 30 años en que se encadenan dos años consecutivos de baja de la actividad.
Sin embargo, el organismo multilateral de crédito estimó que la región volverá a crecer en 2017 para ir ganando impulso y avanzar cerca de un 2 por ciento al año siguiente.
El Banco Mundial diferenció entre dos regiones. Sudamérica, donde espera una contracción de un 2,8 por ciento este año y una leve recuperación el próximo; y México y Centroamérica, que crecerán un 2,7 y un 2,6 por ciento este año, respectivamente.
El Producto Interno Bruto (PIB) de Brasil se contraería un 4 por ciento en 2016 y un 0,2 por ciento el próximo año; mientras que en Venezuela la caída será de un 10,1 por ciento este año y de un 3,4 por ciento en 2017.
Las recesiones en Brasil y la República Bolivariana de Venezuela aún no han tocado fondo y podrían durar más de lo esperado previamente. Hay un riesgo de que las recesiones se contagien a otros países de la región», dijo el banco en una actualización de sus Perspectivas Económicas Mundiales.
El organismo bajó además su previsión para el crecimiento mundial en 2016 a un 2,4 por ciento desde el 2,9 por ciento que anticipó en enero.