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Muchas personas piensan que llevan un estilo de vida saludable. Sin embargo, esta idea puede estar acompañada de una desagradable sorpresa. A continuación recopilamos 10 cosas que probablemente piensas que son sanas, pero resulta que no lo son.

Pan integral

Si comes pan integral que está hecho con harina de trigo, es como si estuvieras comiendo pan blanco, ya que ambos están hechos con harina enriquecida. Es posible que tengas una bolsa en tu despensa y, a menos que la lista de ingredientes diga específicamente «100 por ciento de trigo integral», esa rebanada de pan integral podría no ser tan saludable como piensas.

Las harinas enriquecidas son harinas refinadas, y son despojados de sus nutrientes durante su procesamiento. Éstas no tienen mucho valor nutricional, y cuando son ingeridos causan un pico poco saludable de azúcar en la sangre que puede conducir a enfermedades crónicas e inflamación.

Incluir granos enteros en tu dieta puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como diabetes y las enfermedades del corazón, ya pesar de lo que piensas de los carbohidratos y el aumento de peso, los granos enteros pueden ayudar a mantener un peso saludable.

Barras energéticas

La mayoría de las barras energéticas están dirigidas para deportistas o para aquellos que son serios en sus entrenamientos, ya que algunas están pensadas como sustitutos de las comidas. Algunas barras son más parecidas a las barras de chocolate, al esconder grasas saturadas, azúcar y aceites hidrogenados en sus ingredientes (las calorías pueden ser igual a la de una barra de chocolate).

A menos que estés participando en sesiones de entrenamiento de alta intensidad, una barra energética no es una buena opción de merienda. Asegúrate de que las barras de energía que que comes oscilen entre 100 y 200 calorías, además de que mantengan el azúcar y los carbohidratos bajos. Compara las etiquetas de nutrición para encontrar las mejores barras. Y si estás participando en ejercicios de alta intensidad, busca las barras de energía que proporcionan una buena fuente de proteína.

Bebidas deportivas

Si estás tratando de comer bien, no desvíes esa dieta sana con bebidas deportivas. Las bebidas energéticas y deportivas son muy populares entre los adultos y los adolescentes, pero lo que se recibe es más azúcar y calorías vacías. Para muchas personas es más de lo que están quemando (y eso es lo que lleva al aumento de peso).

Echemos un vistazo a dos bebidas deportivas populares. Una botella de Powerade contiene 125 calorías y 34 gramos de azúcar, que equivale a aproximadamente 8 cucharaditas de azúcar. Mientras que una de Gatorade, contiene 130 calorías y 35 gramos de azúcar, unas 8,3 cucharaditas de azúcar. Ahora ya puedes ver por qué los nutricionistas recomiendan el agua sobre las bebidas deportivas.

Al igual que las barras energéticas, las bebidas deportivas están diseñadas para la reposición de los cuerpos de los atletas, y si no estás involucrado en actividades de alta intensidad, poder omitirlas de tu dieta.

Ser vegetariano

Comer a base de plantas puede ayudar a mantenerte delgado y tener tus niveles de colesterol bajos, e incluso puede ayudarte a vivir más tiempo. Esta forma de comer también puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar varias enfermedades, incluyendo algunos tipos de cáncer.

Hay personas que se consideran a sí mismos vegetarianos, pero no todos ellos comen su parte justa de verduras. Y sin una dieta sana y equilibrada, una dieta vegetariana no puede ser más saludable que la de un consumidor de carne.

Algunos vegetarianos, especialmente aquellos que están recién convertidos, se basan en los alimentos procesados, como productos falsos de carne, carbohidratos (arroz blanco y pasta), queso y alimentos chatarra. Sin importar si comes carne o no, si se ingieren alimentos procesados se agregan sales innecesarias, azúcar y grasas en su dieta (que también añaden peso no deseado y aumenta el riesgo de enfermedades crónicas).

Mantequilla de cacahuate baja en grasa

La mantequilla de maní baja en grasa puede sonar como una buena idea. Menos grasa es bueno, ¿verdad? El problema con la grasa reducida en mantequillas de maní es que usualmente compensan la pérdida con azúcar añadida.

El exceso de azúcar en la dieta puede conducir a la sensibilidad a la insulina o azúcar en la sangre, lo que puede conducir a la diabetes tipo 2 y otros problemas de salud.

La mejor mantequilla es la más natural. Es mejor ingerir mantequillas de maní sin edulcorantes añadidos.

Cualquier cosa baja de grasa

Alimentos sin grasa, bajos en grasa o reducidos en grasa pueden sonar como una buena idea. Mientras menos grasa en la dieta puede ser una buena cosa, los productos con estas etiquetas generalmente tienen un precio: cuando la grasa se elimina de un producto, su contenido de sodio y azúcar a menudo aumenta, al igual que el espesante y químicos contenidos, todo ello en el nombre de tratar de imitar el sabor de grasa natural.

La grasa ayuda al cuerpo a funcionar correctamente, absorber las vitaminas y minerales importantes, y regular las hormonas. La grasa en los alimentos que comemos también ayuda a saber cuándo estamos llenos, para no comer en exceso. La grasa es también energía para el cuerpo.

El objetivo no debe ser la eliminación de todas las grasas de tu dieta, lo que importa es el tipo de grasa. Las grasas saturadas (como la mantequilla) y grasas trans (incluidos los aceites vegetales parcialmente hidrogenados) son las llamadas grasas malas, y están vinculadas a enfermedades crónicas tales como la inflamación, la diabetes tipo 2 y enfermedades del corazón. Las grasas no saturadas, tales como ácidos grasos omega 3 se consideran grasas saludables para el corazón.

Gel antibacterial

No hay nada como lavarse las manos con jabón y agua, pero cuando esto no es posible, utilizando un desinfectante de manos con una concentración de al menos el 60 por ciento de alcohol (etanol, alcohol etílico o isopropanol) es una gran manera de reducir la propagación de los gérmenes y bacterias (es decir, siempre y cuando sus manos no están visiblemente sucias). Los expertos recomiendan aplicar suficiente desinfectante para mojar las manos. Pero, ¿el uso de desinfectante es malo? Puede ser.

Vamos a hablar acerca del sistema inmunológico. Es importante protegerse contra infecciones, pero también es bueno permitir que existan algunos gérmenes y microbios. Sin la exposición a los gérmenes, no se va a construir una resistencia a éstos en cualquier estornudo o tos que se presente.

Aceite de oliva extra light

El aceite de oliva contiene grasas monoinsaturadas, un tipo de grasa asociada con un menor riesgo de enfermedades del corazón, diabetes tipo 2 y algunos tipos de cáncer cuando se incluye en una dieta de manera sana.

¿Sabías que el aceite de oliva extra light no es tan ligero? “extra light” en este caso se refiere a la forma en que el aceite se procesa, y el aceite de oliva extra ligero es uno de los aceites más refinados que encontrarás (podrás reconocerlo de los otros tipos de aceites de oliva, ya que es el que tiene el color más claro y tiene el sabor más suave). Ya sea pálido, mantecoso o verde, el aceite de oliva sigue siendo aceite, y cada cucharada contiene 120 calorías.

Smoothies

Los smoothies lucen como una merienda saludable o un reemplazo de comida (y pueden serlo) si se ingieren de manera correcta. Sin embargo, debido a que algunos licuados contienen más azúcar que frutas frescas, yogur y leche descremada, pueden reventar fácilmente una dieta.

Un licuado con plátano y jugo de papaya, por ejemplo, tiene menos de 300 calorías, mientras que uno de mantequilla de maní con chocolate cuenta casi con 700.

Refresco dietético

Cuando bebes refrescos de dieta puedes eliminar algunas calorías, pero a un costo ya que todavía estás ingiriendo refresco, y todo lo malo de los ingredientes que vienen junto con él.

Un estudio reciente vinculó un mayor riesgo de desarrollar diabetes con beber un refresco (de dieta o regular) al día. La investigación adicional sugiere que los edulcorantes artificiales utilizados en refrescos de dieta en realidad pueden estar en contra de las personas.

Los refrescos de dieta pueden tener menos calorías que las versiones regulares, pero los edulcorantes artificiales pueden causar aumento de peso, y las personas que beben refresco de dieta tienen una mayor circunferencia en su cintura, en comparación con las personas que no consumen bebidas de dieta.