El desconocimiento o el no estar informados sobre la propiedad o pertenencia de algún edificio histórico, provoca que se cometan alteraciones o mantenimientos que trasgreden la belleza arquitectónica de estos, dio a conocer el director del Instituto Intermunicipal Metropolitano para la Planeación del desarrollo Integral Sustentable de las Altas Montañas, Luis Rubén Hernández.
Ejemplos hay muchos en todos lados, por ello, dijo, se pretende que a gente tenga información sobre su propiedad, que investiguen y pregunten para conocer si entra dentro del catálogo de edificios históricos y en caso de pretender una reparación o remodelación, estén en condiciones de hacerlo de la manera correcta.
“Lo que se debe saber es que en la mayoría de las veces por desconocimiento se destruye, por eso es bueno que estemos informados, aunque estos propietarios intentan darle un mantenimiento o hacer que se vea de la mejor calidad”, señaló.
Luis Rubén Hernández consideró que a habido casos en que se ha afectado al sitio en su belleza e historia y desafortunadamente, de algunos edificios históricos no existe antecedente o archivo fotográfico, por lo cual resulta más difícil planear una remodelación.
Por ello, tanto en el Instituto Nacional de Antropología e Historia, INAH, como en el Instituto Nacional de Bellas Artes, INBA, cuentan con toda la información sobre el tipo de arquitectura y es ahí donde se deben conseguir los requerimientos y cuidados que se deben tener con estas joyas arquitectónicas.
Dijo que la difusión de la Cultura es importante y el deber como propietario de un edificio histórico es el de conocer precisamente su historia, informarse y preguntar lo relacionado a la mejor forma en que se pueda dar el mantenimiento.
“Debemos saber que el valor patrimonial se debe distinguir del valor económico, pues el primero guarda los atributos históricos y artísticos de la cultura y esta no es propiedad, sino identidad de todos”, concluyó.
