Vicente del Bosque confirmó que en los próximos días abandonará su cargo de entrenador de la Selección de España y que no volverá a sentarse en un banquillo, aunque todavía falta hacerlo oficial.
Del Bosque, quien ha estado ocho años como responsable de la Furia Roja, negó, sin embargo, que se haya reunido en estos días con el presidente de la Real Federación Española de Futbol, Ángel María Villar, para presentarle su dimisión.
«Sin ninguna duda, no tengo intención de seguir como seleccionador. Es un asunto que llevamos tratando hace tiempo. Es una decisión tomada», dijo en el programa Radiogaceta de los Deportes de Radio Nacional de España.
«El presidente (Villar) nos acompañó a Madrid a todos y luego salió hacia París. No tuvimos comunicación. No me he reunido con él ni he tenido conversación con él», insistió el aún timonel de España.
Asimismo, precisó que su decisión no dependía del resultado en la Eurocopa, donde fueron eliminados por Italia en los Octavos de Final.
«Era una decisión tomada de antemano. Saliera como saliera el Europeo, estaba decidido. No me hago el interesante. Ni me exhibo ni me oculto», advirtió Del Bosque.
El español rechazó que su dimisión se deba a fatiga o asuntos personales y, además, afirmó que nadie lo ha consultado para recomendar un sustituto para su puesto.
«Yo sigo hasta el 31 de julio. Y el presidente, cuando crea oportuno, hará las cosas. No me han preguntado por sustitutos. Yo haré lo que la Federación me diga. Hay gente muy cualificada.
«El 31 de julio dejaré el futbol. Estaré en disposición de ayudar. Dejaré los banquillos aunque siempre estaré cerca de él, deseando que las cosas vayan bien en el futbol español. Si puedo ayudaré en algo», remató.
