Existen ciertas hormonas que producen sensación de saciedad, por lo que una clave para controlar el apetito es conocer cuáles son y qué comer para estimular su producción. De esta manera, podrás suprimir tu apetito y ayudarte a bajar de peso para tener un cuerpo delgado y sano.
1. Colecistoquinina: Esta hormona, que se produce en el intestino y viaja por los nervios sensoriales, envía señales de saciedad. Se cree que la toronja es una productora de la colecistoquinina, por ello su reputación dietética. Además, al consumir omega-3 se produce dicha hormona, por lo que se recomiendan alimentos como: aceite de linaza, semillas de linaza, chía, nuez, verdolagas, semillas de calabaza, girasol, ajonjolí, germen de trigo, vegetales verdes y pescados de agua fría.
2. Leptina y PPAR: Regulan la entrada y salida de los azúcares y grasas a las células, y cuando están activos queman la grasa. Por ello, se deben consumir semillas de linaza, que favorecen el gasto calórico, y pescados de agua fría como salmón, arenque, trucha y sardinas.
3. GLP1 y PYY: Cuando el estómago e intestino se distienden, estas hormonas mandan impulsos nerviosos al cerebro que evitan el apetito. La clave indispensable para darle volumen al estómago y tener sensación de saciedad, es aumentar el consumo de fibra y tomar suficiente agua. Se recomienda comer dos platos de ensalada al día, así como frijoles, lentejas, garbanzo, habas y chícharos. Elige frutas con mucha fibra como ciruelas, fresas, zarzamoras y duraznos.
La temperatura corporal también interviene en el control del apetito. El hambre baja la temperatura, mientras que la satisfacción la aumenta. En muchos restaurantes ponen el aire acondicionado muy frío, lo que incita a las personas a comer más.