Es una de las cosas más sensuales que puedes hacer con tu pareja y un placer al que muchos no están dispuestos a renunciar, ni siquiera por amor. Y es que según un estudio realizado por e-Darling y la Nevera Roja: compartir gustos gastronómicos ayuda a triunfar en el amor.
De hecho, si no hay compatibilidad culinaria, la tensión entre la pareja irá in crescendo, surgirán discusiones por todo, alguien se frustrará y la relación saldrá dañada.
No exagero. Cuando un hombre o una mujer escucha a su pareja pronunciar estas palabras: “Mañana me pongo a régimen”, se le abren las carnes porque como aseguran los expertos: “Comer es un placer tan esencial como el sexo”, y para la mayoría es de vital importancia poder compartirlo y disfrutar de esas sensaciones con su otra mitad.
De hecho, el 65 por ciento de las mujeres y el 66,15 por ciento de los hombres consideran muy importante tener gustos gastronómicos similares a los de sus compañeros y, sobre todo, valoran especialmente la posibilidad de poder cocinar juntos.
Además, el estudio indica que para el 80% por ciento “sería un problema que mi pareja sólo consumiera comida basura“ ya que normalmente se asocia a experiencias negativas de la vida.
Para muchos es importante poder compartir gustos gastronómicos o experiencias culinarias durante la relación porque es una manera de pasar momentos juntos. Pero comer también dice mucho de nosotros, y las personas con unos hábitos alimenticios saludables son vistas como mejores parejas, puesto que se asocian a experiencias positivas.
Es cierto, todos solemos asociar la comida saludable con la felicidad y la salud, ambas cosas muy deseable en alguien con quien esperas compartir más que la primera cena, ¿verdad?
Cocinar en pareja es un rito que muchos consideran “excitante” porque da pie a bromas y juegos eróticos al tiempo que sirve para pasar un buen rato juntos, comentando los entresijos del día.
Como en el sexo, el olfato y el gusto juegan un papel esencial en la cocina, que puede ser tan ‘erotizante’ como una buena caricia o un beso húmedo en los preliminares. ¿Y qué decir de la vista? El mejor afrodisíaco para los hombres. Prueba a ponerle delante un plato suculento bien presentado, vestida de modo provocativo, y espera a ver a qué hinca el diente primero.
“Comer no es solamente un acto de supervivencia, sino que, alrededor de la comida, entran en juego los cinco sentidos, además de ciertos aspectos psicológicos como las expectativas, la memoria o las emociones”, explica explica a edarling Jonathan García Allen, psicólogo, coach y experto en Mindfulness.
“Las experiencias gastronómicas se vinculan al ocio, pero, en una primera cita, también es importante crear un clima de confianza y deseo”, añade el experto.
Por eso una luz tenue, música sugerente y un aroma agradable hacen que se despierten nuestros sentidos contribuyendo a que seamos más amables y abiertos con la otra persona.
Sin duda, la gastronomía tiene el poder de unir a las parejas, pero en ocasiones… ¡puede separarlas para siempre!