El tenista serbio, Novak Djokovic se instaló en los octavos de final del Masters 1000 de Toronto, tras vencer al zurdo luxemburgués Gilles Muller por parciales de 7-5 y 7-6 (7/3).
Luego de la tan sonada derrota padecida en la tercera ronda de Wimbledon, “Nole” se tomó un merecido respiro y este miércoles reapareció en escena para tratar de conquistar un título que se le resiste desde 2012.
Con la ayuda de 30 puntos ganados de 39 que puso en juego con su primer servicio, el número uno del mundo se las ingenió para resolver el acertijo de su rival, quien sacó muy bien a lo largo del partido y apenas unos pocos descuidos lo privaron de lograr un auténtico batacazo.
En la primera manga, “Djoker” tan sólo generó una chance de rompimiento, en el 5-5, y le bastó con consumarla para inclinar los cartones de su lado.
A Muller le costó reponerse del golpe anímico y cuando el segundo capítulo despuntaba, ya se encontraba con quiebre abajo; no obstante, el oriundo de Belgrado perdió esa ventaja más adelante y dejó entrever que los “fantasmas” del All England Club aún se aparecen.
Con todo y sus irregularidades, Djokovic sacó para la victoria con respaldo de 5-4, pero falló en el intento y no le quedó de otra que definir su pase por la vía del desempate, donde remontó un 1-3 con una seguidilla de seis puntos.
Con esa dosis de confianza, “Nole” fijó cita en octavos de final contra el veterano checo Radek Stepanek, procedente de la “qualy” y verdugo del local Peter Polansky por pizarra de 7-6 (7/5) y 6-4.
En otros frentes celebrados hoy, el japonés Kei Nishikori y el belga David Goffin también hicieron valer su condición de favoritos y se anotaron un triunfo en segunda ronda, a la cual avanzaron de forma directa gracias a su preclasificación.