No puedo decir que algunos de ellos no hicieron algunas locuras como bloquear un edificio para que no tomara posesión  un rector de la UV (que no tomó: JMP), en ese entonces designado por el gobernador del estado, y aunque varios de ellos al terminar su gestión Roberto Bravo Garzón en Rectoría de la UV, fuero satanizados, al paso de los años los ve uno y son personas normales, que han realizado una actividad útil y son muy apreciados. Me refiero a algunos de ellos: el odontólogo Rigoberto Roa Romero (en foto ayer  en el Estadio de los Astros de Houston), Cándido Navarro (ex-alcalde de Tlapacoyan); Enrique Colar investigador, amigo del presidente Echeverría en aquel entonces),  Raúl Galeana (persona noble, siempre muy cerca de Rafael Arias)  y «Fabiancito» Vázquez (funcionario conciliador muchos años de la Secretaría del Trabajo federal, junto al finado Emilio Gómez Vives), entre otros.. Un saludo a todos ellos con estimación..