La Secretaría de Salud de la Ciudad de México destina por lo menos 60% de su presupuesto para enfermedades en padecimientos que tienen que ver con la obesidad y sobrepeso, señaló Armando Ahued, titular de la dependencia.
El funcionario señaló que por ejemplo, en el caso de las diabetes, es la capital de las entidades con mayor número de enfermos y de fallecimientos. En este caso, hay factores hereditarios que propician el factor de la enfermedad; sin embargo, gran parte de este diagnóstico depende de la alimentación y a la falta de actividad física.
Tras una reunión que sostuvo con nutriólogos con motivo del Día Mundial de la Alimentación, el secretario detalló que un paciente con hemodiálisis cuesta más de 220 mil pesos al año, es decir, que representa gastos “muy fuertes”.
Durante su mensaje a nutriólogos, el secretario mencionó que los malos hábitos alimenticios pueden restar hasta diez años de esperanza de vida. Por ello destacó las labores de prevención sobre los efectos de no cuidar la alimentación desde pequeños.
