Raiders de Oakland y Texanos de Houston buscarán estar el menor tiempo posible en la Ciudad de México por el tema de la altura, todo ello para tratar de tener el menos desgaste físico con miras al resto de la temporada en la NFL.
Con los dos equipos metidos de lleno en la lucha por la postemporada, el director de NFL México señaló que de acuerdo a consejos de los especialistas las franquicias buscarán llegar en la tarde o noche previa al partido, jugar el lunes 21 de noviembre y regresar lo más pronto posible a su ciudad.
No llegarán con mucha anticipación porque están conscientes de la altura que tiene la capital y los expertos les han dicho que había que arribar con mucha anticipación, algo así como dos semanas para aclimatarte, o por el contrario llegar con el menor tiempo posible para que no afecte el rendimiento físico”, apuntó Olivé.
Señaló que el Estadio Azteca ya ha sido entregado y los tiempos marchan acorde a lo planeado para realizar el primer “Monday Night Football” que se juega fuera de Estados Unidos.
Ya no habrá eventos en el Azteca, tenemos el tiempo ideal para que el pasto esté en las mejores condiciones. Se dice fácil pero la Liga estudió mucho para realizar este encuentro y ahora nos toca llevar esta experiencia al nivel de nuestros colegas de Londres que llevan años; estoy seguro igualaremos esa vara impuesta por ellos”, señaló.
Adelantó que para el 21 de noviembre se espera la asistencia de 75 mil a 80 mil personas en el Coloso de Santa Úrsula, y que además del encuentro como parte de toda la fiesta que significa traer la NFL a México habrá un Fan Fest un fin de semana antes.
De momento detalló que harán una zona especial con entrada libre, la cual tendrá además de juegos y eventos de los patrocinadores, sorpresas con porristas y ex jugadores.