Las intensas lluvias que se han presentado en los límites de Veracruz y Tabasco, provocaron el desbordamiento del río Tonalá, cuerpo de agua que separa a los dos estados.
Como resultado, el afluente invadió más de una docena de negocios que se encuentran sobre la ribera, trayendo consigo pérdidas económicas al sector restaurantero, debido que los fuertes vientos también levantaron el techado de algunas palapas.
Uno de los establecimientos más afectados, es la del restaurante Doña Elena, quien perdió parte de los enceres, además que sus refrigeradores resultaron dañados, por lo que muchos de los prestadores de servicio a traviesan por una severa crisis.
La fuerza de la corriente fue tal, que arrastró gran parte de arena de los litorales, por lo que los efectos de la erosión deberá ser considerados, por lo que en algunos sectores de esta franja, analizan colocar una barrera de costales con arena, para evitar que se ponga en riesgo las construcciones.
Los afectados, destacaron que pedirán el apoyo del gobierno de los distintos órdenes, para que puedan ser apoyados a través de los programas que atienden a los sectores afectados por los fenómenos naturales.