El conjunto de Benfica, donde milita el delantero mexicano Raúl Jiménez, dejó escapar una cómoda ventaja de tres goles en la primera mitad para terminar por empatar 3-3 contra Besiktas, por lo que complicó sus aspiraciones dentro de la Champions League.
La victoria daba a las “Águilas” un boleto a los octavos de final de la Liga de Campeones de Europa, sin embargo no fueron capaces de aguantar la presión del rival y en el segundo tiempo concretaron la debacle para obtener un empate con sabor a derrota.
En hostilidades del Grupo B, el equipo lusitano llegó a la cancha del Vodafone Arena con el cometido de no perder para continuar con sus aspiraciones en la máxima competición del mundo a nivel de clubes, sin embargo en cuestión de minutos dejó ir de sus manos el premio completo.
Ahora, Benfica se jugará su futuro en Champions en la última fecha de la ronda de grupos cuando reciba al Napoli, al que tendrá que vencer para no depender de lo que haga Besiktas contra Dinamo Kiev.
Este miércoles el equipo luso protagonizó una buena primera mitad que hizo suponer un compromiso sencillo, pues al descanso se fueron 3-0 de forma contundente con los goles de Goncalo Guedes (10), Nelson Semedo (25) y del serbio Ljubomir Fejsa (31).
No obstante, el “infierno turco” no se hizo esperar para obligar al Benfica a mirar el reloj en cada momento, rogando para que terminara el encuentro, dado que Besiktas replanteó el juego y con dos goles se metió a la pelea.
Primero recortó distancias Cenk Tosun, al minuto 58, y después una mano dentro del área por parte del sueco Victor Nilsson provocó un penal a favor de los otomanos que transformó el portugués Ricardo Quaresma para poner el 2-3, al 83.
Ante tal situación, por las “Águilas” ingresó al campo el mexicano Raúl Jiménez (86) en lugar del griego Konstantinos Mitroglou, un cambio para quemar tiempo, e incluso el hidalguense cometió falta en campo contrario para que el duelo terminara.
Pero la insistencia local rindió frutos cuando Quaresma, surgido del Sporting Lisboa, acérrimo rival del Benfica, envió pase al camerunés Vincent Aboubakar para que venciera al portero Ederson Moraes y así pusiera cifras definitivas 3-3, al 89.
Todavía con cinco minutos agregados, Besiktas siguió al ataque a sabiendas de que podía firmar una remontada histórica, algo que no sucedió pero que sí le permitió seguir con vida en esta edición de la Champions, por lo que todo quedó abierto para la última jornada.
Con este resultado Benfica llegó a ocho unidades en la cima del Grupo B, por delante del Napoli, que tiene siete con un juego menos, mientras que Besiktas alcanzó también siete puntos en el tercer sitio.
En el fondo quedó Dinamo de Kiev con un punto, quie n ya está eliminado a falta de su visita a Italia para que cada club acumule cinco partidos en esta fase.
