La policía anunció hoy que 98 clubes están afectados y 83 sospechosos han sido identificados en relación a las denuncias de abusos sexuales no recientes a niños en el futbol británico.
El comunicado detalló que los agentes de la operación «Hydrant» (Boca de Riego), encargados de la coordinación de los casos, recibieron 639 referencias a través del servicio de ayuda telefónica que puso en marcha la NSPCC (la Sociedad Nacional para la Prevención de la Crueldad contra los Niños) o de investigaciones policiales.
No obstante, la policía matizó que todas las referencias no equivalen a casos distintos, ya que se puede tratar de testigos o víctimas o ser información duplicada. «El número indicativo de víctimas provisto previamente de 350 continúa siendo de aplicación hasta que el proceso de análisis de la información remitida a la operación ‘Hydrant’ esté completa», advirtió.
También se subrayó que los 98 clubes mencionados no están necesariamente bajo investigación, sino que aparecen en las informaciones que están siendo analizadas. «Se está actuando con rapidez respecto a todas las denuncias recibidas por las fuerzas policiales de todo el país», dijo el jefe policial encargado de la protección infantil, Simon Bailey.
«Estamos garantizando un enfoque eficiente y eficaz de todo el servicio en la investigación de las denuncias, eliminando la posibilidad de duplicación y permitiendo el intercambio oportuno y efectivo de inteligencia e información entre departamentos», añadió «También estamos colaborando estrechamente con la Federación de Fútbol para asegurar que toda la información pertinente que poseen se comparte con las investigaciones en curso», agregó. El escándalo sobre abusos sexuales en el pasado se desató a raíz de una entrevista del ex futbolista Andy Woodward con el periódico «The Guardian», en la que reveló que había sido víctima de un entrenador cuando era un niño en Crewe.