El matador colombiano Luis Bolívar, que estuvo en la corrida en la que reabrió la plaza de toros de Bogotá el pasado domingo tras cinco años, denunció que recibió insultos y amenazas a través de las redes sociales.
Este es uno de muchos mensajes recibidos, los personajes llamados animalistas», escribió Bolívar en su cuenta de Twitter, un mensaje que acompañó de una captura de uno de los mensajes que recibió y en el que un usuario le insultó y le amenaza con matarle «a puñaladas» si se encuentra con él.
El mensaje que compartió Bolívar también le desea la muerte a su familia, por lo que el torero preguntó a sus seguidores qué hacer y si debía interponer una denuncia.
Bolívar fue el protagonista junto a Julián López «El Juli» y Roca Rey de la corrida de toros del pasado domingo, la primera en la capital colombiana en cinco años y en la que lidiaron seis astados de la ganadería «Ernesto Gutierrez».
La plaza de toros Santamaría de Bogotá cerró en junio de 2012 por orden del entonces alcalde, el izquierdista Gustavo Petro, quien consideró que ese escenario debía usarse para «actividades de vida y no de muerte«.
Sin embargo, en septiembre de 2014 la Corte Constitucional ordenó el regreso de las corridas de toros a la Santamaría al fallar en favor de la Corporación Taurina de Bogotá una acción de tutela (recurso de amparo) presentada contra la decisión de Petro.
La Corte Constitucional consideró entonces «que no existe una norma legal que imponga la prohibición general de los espectáculos taurinos» y recordó que la tauromaquia es una «tradición cultural de la Nación, susceptible de ser reconocida por el Estado».
En la reapertura del coso el pasado domingo hubo una gran manifestación antitaurina en los alrededor de la Santamaría en la que los protestantes insultaron a los aficionados que entraban a la corrida y les arrojaron objetos.
El Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía intervino para tratar de mantener el orden y en los disturbios que siguieron 34 personas resultaron heridas, cinco de ellas policías.
El actual alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, que se pronunció en varias ocasiones contra los toros decidió prohibir manifestaciones en los alrededores de la Santamaría durante el resto de la temporada taurina.
En este sentido, Bolívar dijo que el fin de su profesión «será cuando el aficionado deje de asistir a los toros«.
De lo contrario somos libres de elegir lo que nos gusta», concluyó.