Durante un juego de la Liga Checa, un futbolista evitó una tragedia, luego de seguir su instinto y salvarle la vida al portero rival, mostrando así que la rivalidad pasa a segundo plano cuando la salud de un compañero está en peligro.
Corría el minuto 28 del juego entre Bohemians 1905 y el Slovacko, cuando el gurdameta del conjunto local, Martin Berkovec, intentó despejar un balón de su área, pero para su desgracia chocó con la cabeza de un jugador de su mismo equipo.
De forma inmediata, Francis Koné, delantero del Slovacko, acudió a darle los primeros auxilios al portero para evitar que éste se tragara su propia lengua, lo que evitó que Berkovec sufriera un daño mayor. Tras el fuerte golpe, el checo fue trasladado a un hospital.
Cabe destacar que no es la primera vez que Koné se ‘convierte en un ángel’ dentro del terreno de juego, ya que en otras tres ocasiones había ayudado a compañeros lesionados, una vez en la Liga de Tailandia y dos cuando jugaba en África.
