Un doblete del argentino Gonzalo Higuaín permitió a la Juventus impedir la remontada de un Nápoles valiente y metió al club turinés en la final de la Copa Italia, en la que se enfrentará al Lazio, que el martes eliminó a la Roma.
Juventus se adelantó en dos ocasiones, gracias a los goles del exnapolitano Higuaín, pero los «azzurri» nunca dejaron de luchar y remontaron hasta el 3-2, en virtud de las dianas del eslovaco Marek Hamsik, el belga Dries Mertens y Lorenzo Insigne.
El «Pipita», que volvía a jugar en el San Paolo napolitano cuatro días después del partido empatado a uno en la Serie A (Primera División), fue silbado duramente por sus exaficionados, pero contestó con dos goles fundamentales para sellar el pase a la final.
Los turineses disputarán el próximo 2 de junio en el estadio Olímpico su tercera final de Copa consecutiva, en la que defenderán sus últimos dos títulos contra Lazio.