Miles de personas tomaron las calles de al menos una decena de las principales ciudades de Brasil para manifestarse contra el gobierno de Michel Temer, acorralado por un monumental escándalo de corrupción.
Las manifestaciones fueron convocadas a través de las redes sociales por organizaciones de la sociedad civil, que además de exigir el fin del gobierno de Temer, pidieron convocar elecciones generales.
Las principales concentraciones se desarrollan en Río de Janeiro, Sao Paulo y en la capital, Brasilia, en medio de fuertes operativos de seguridad.
El nuevo escándalo que sacude Brasil estalló en la noche del miércoles, cuando el diario O Globo reveló la existencia de unas grabaciones que apuntan a que Temer dio el aval para comprar el silencio del expresidente de la Cámara de Diputados Eduardo Cunha, preso por corrupción.
Cunha fue el principal artífice del proceso destituyente contra Dilma Rousseff, a quien sucedió en mayo del pasado año Michel Temer en la Presidencia.
En medio de rumores sobre su renuncia, Temer se aferró este jueves al cargo y negó en un mensaje a la nación que vaya a dejar la presidencia.
La oposición, por el contrario, sostiene que el único fin posible es la «renuncia inmediata» del presidente.
Según la Constitución, si Temer renuncia o es destituido, el Congreso deberá realizar una elección indirecta para escoger a quien completará el período que inició Rousseff en 2015, que concluye el 1 de enero de 2019.
Sin embargo, el propio Congreso podría aprobar una enmienda para convocar una elección directa este mismo año, un asunto sobre el que existen propuestas que ya tramitan en las cámaras.
La nueva crisis institucional ha provocado una caída de cerca del nueve por ciento de la bolsa de Sao Paulo y un desplome del real frente a la divisa estadounidense.