*Exitosa presentación de Francisco Suárez, el Mago Frank, en una faceta poco conocida.
Excelente fue la respuesta del público a un espectáculo de calidad. La Historia de Gazapo se presentó por primera vez en Xalapa, la noche de este viernes, con gran éxito y Francisco Suárez, El Mago Frank, sorprendió con una faceta poco conocida.
Durante dos horas, el creador del monólogo que celebra 12 años de presentarse en distintos escenarios de México mantuvo la atención del público, que reía a carcajadas ante el humor fino, guardaba silencio frente a un hombre encarcelado o aplaudía la picardía y el ingenio del hombre enamorado.
La obra presenta una serie de reflexiones de un hombre acerca del amor como experiencia humana y, por tanto, limitada, que busca, sin embargo, expresarse, mostrarse, salir en busca del objeto amado; también como aprendizaje que lleva a la plenitud, mediante actos de libertad y responsabilidad.
La primera parte, llena de poesía y versos y rima y prosa; la segunda, una especie de síntesis o moraleja, una invitación al amor en serio. Fue entonces que el público se puso en pie para aplaudir a Francisco Suárez, quien, luego de ocultarse, en cinco de segundos cambió de vestuario.
Finalmente, mientras invitaba al público a ver nuevamente la obra, el Mago Frank no perdió la oportunidad de hacer un truco más, ante el cual el auditorio volvió a explotar en aplausos. Una larga fila se formó para la firma de autógrafos y de selfies. Espléndida la respuesta del respetable a un espectáculo de calidad.