En el marco de la conmemoración del Día Mundial de la Tiroides, la doctora Ana María Uribe Díaz, endocrinóloga de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) del Centro Médico Nacional “Adolfo Ruiz Cortines” del Instituto Mexicano del Seguro Social, recomienda estar atentos a cualquier síntoma que pudiera ser indicio de un mal funcionamiento de la glándula tiroides.
La glándula tiroides es la principal responsable del control metabólico en el organismo, es esencial para el funcionamiento de todos los tejidos corporales, pues secreta dos hormonas importantes, la tiroxina -T4- y la triyodotironina -T3-; ambos componentes contienen yodo.
Estas hormonas regulan el metabolismo del cuerpo; así como la calcitonina que es fundamental en el metabolismo del calcio; por ello la importancia de vigilar el funcionamiento de la tiroides.
Así mismo, el hipotiroidismo primario, es la segunda enfermedad endocrina más frecuente, después de la diabetes mellitus; causa cambios metabólicos, fisiológicos y bioquímicos, que afectan a la mayoría de los sistemas en el organismo.
Otras enfermedades causadas por el mal funcionamiento de la tiroides son: enfermedad de Graves, bocio multinodular tóxico, adenoma tóxico; hipertiroidismo y tumor trofoblástico, entre otros.
La sintomatología que suele aparecer en algunos casos es: aumento del apetito; pérdida de peso, nerviosismo e irritabilidad, palpitaciones y taquicardia, temblor fino distal, intolerancia al calor; aumento de la sudoración; piel caliente y enrojecida, nauseas, vómito y diarrea e irregularidad de la menstruación.
También suelen presentarse fertilidad disminuida; prurito generalizado; dificultad para dormir o insomnio; alteraciones del estado de ánimo; perdida del cabello; aumento de la presión arterial; fatiga y debilidad muscular; bocio y problemas oculares.
Sin embargo, el 50 por ciento de estos pacientes no presentan ningún síntoma detectable, y en otras ocasiones se confunden con otros padecimientos, por ejemplo -palpitaciones y temblor-, son indicios de hipertiroidismo y que fácilmente se confunden con trastornos de ansiedad.
Para finalizar, la endocrinóloga Uribe Díaz recomendó a los derechohabientes que si presentan síntomas, acudan de inmediato a su Unidad de Medicina Familiar (UMF), para orientación y valoración en caso de ser necesario.