Los recursos que reciben los gobiernos de estados y municipios de la federación crecieron 30 por ciento desde el inicio del actual gobierno en diciembre de 2012, pero a nivel local persiste una baja recaudación de impuestos, como el predial, sostuvo José Antonio Meade Kuribreña, secretario de Hacienda y Crédito Público.
«Al paso que vamos el secretario de Hacienda va tener que ir con los gobernadores a pedirles apoyo económico y no como ocurre ahora», dijo Meade Kuribreña durante la entrega del III Premio nacional de investigación impulso al desarrollo de las finanzas estatales, convocado por la Universidad Nacional Autónoma de México, el Grupo Financiero Interacciones y la firma de contaduría PWC.
A partir de la reforma fiscal emprendida al inicio de la administración, el Estado ha logrado obtener mayores recursos y hacerlo a partir de fuentes menos volátiles, como las derivadas de la exportación de petróleo crudo, añadió Meade en una ceremonia en la que también estuvo Enrique Graue, rector de la UNAM, y Carlos Hank Rhon, presidente de Interacciones.
En 2012 los ingresos tributarios eran equivalentes a 8.4 por ciento del producto interno bruto (PIB), proporción que aumentó a 13.9 por ciento del producto, apuntó. El cambio significa que aumentó la recaudación, pero en ese mismo periodo se redujo la dependencia de los ingresos petroleros.
Del inicio de la administración a la fecha, la proporción de ingresos petroleros respecto de los ingresos totales disminuyó de 39.4 a 16.3 por ciento, «lo que quiere decir que nuestras finanzas son más sanas, dependen de ingresos más estables y dejan de depender de fuentes volátiles, como el petróleo. México no solo recauda más, sino que lo hace cualitativamente mejor».
En el proceso de fortalecer las finanzas públicas, a los gobiernos de los estados les ha ido bien, dijo. En lo que va de la administración, las participaciones han crecido a una tasa real de 5.3 por ciento al año y las aportaciones lo han hecho 2.3 por ciento, también en promedio anual.
A cinco años de distancia, los gobiernos de los estados están recibiendo 30 por ciento más de recursos que al inicio de la administración, añadió.
El reto por delante es lograr a escala estatal y municipal algo similar a lo ocurrido con la recaudación federal, que las administraciones locales sean capaces de fortalecer sus ingresos y ser más eficientes en las inversiones que realizan, apuntó.
Mencionó el caso del impuesto predial, cuya recaudación es responsabilidad de los gobiernos locales y que, en México, sólo equivale a 0.3 por ciento del PIB, una sexta parte del promedio para los países que pertenecen a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Puso como ejemplo de la forma en que se debe fortalecer la recaudación de impuesto predial el caso de Acapulco, Guerrero. En ese lugar, uno de los sitios turísticos más conocidos de México en el mundo, algunos condominios pagan por mantenimiento del inmueble seis veces más de lo que enteran a la autoridad local por impuesto predial, dijo.
En el mismo evento, Carlos Hank Rhon, presidente del Grupo Financiero Interacciones, aseguró que a través del financiamiento a gobiernos estatales y municipales para la construcción de infraestructura ese intermediario financiero impulsa el desarrollo del país y eleva el bienestar de millones de mexicanos.
«El tema de las finanzas estatales ha sido ampliamente discutido. El gobierno federal, de la mano del Poder Legislativo, hicieron realidad la Ley de disciplina financiera, que hoy nos permite contar con bases sólidas que abonan en la transparencia y rendición de cuentas y, sobre todo, con proyectos con impacto positivo en la población», dijo Hank Rhon.
En la categoría de licenciatura, el primer lugar del premio fue concedido a Viviana Elizabeth Zárate Mirón, de la Universidad Popular Autónoma de Puebla (UPAEP), por la investigación «El impacto de las calificaciones de riesgo sobre la eficiencia y el cambio técnico de las finanzas públicas estatales en México».
En la categoría de posgrado e investigación, el trabajo ganador fue el de Alfonso Mendoza Velázquez, también de la UPAEP, con la investigación «Los determinantes financieros de la brecha crediticia de los estados en México: el impacto de la gran crisis».