La Casa Blanca anticipó que llevará al Congreso una propuesta para modificar una ley que prohíbe que los nuevos inmigrantes reciban asistencia del gobierno federal, tras insistir en que dicha legislación no es aplicada por las autoridades responsables.
El vocero presidencial Sean Spicer salió igualmente al paso de las críticas contra el mandatario, quien en un discurso en Iowa pareció ignorar la existencia de la ley que establece ya dicha prohibición, por lo que pareció que presentaba algo como nuevo.
“El presidente sabe de esa ley”, aseguró el vocero presidencial sobre la legislación promulgada por el presidente William Clinton en 1996, la cual prohíbe a los nuevos inmigrantes recibir asistencia del gobierno durante sus primeros cinco años en el país.
Trump dijo también que su deseo es que exista una legislación pronto, aunque la vocera presidencial Sarah Huckabee Sanders había dicho a reporteros el jueves que se trata de una simple idea.
Sin embargo, Spicer dejó en claro que la intención del mandatario es avanzar cuanto antes, pese a que, al ser cuestionado sobre si ya contaban con el borrador de su iniciativa, respondió categórico “en este momento no la tenemos”.
“La preocupación del presidente con todas las leyes de migración, hablando de manera general, es que las leyes no esta siendo aplicadas. Hay varias leyes que no están siendo aplicadas”, manifestó el vocero.
Spicer sostuvo que eventualmente la Casa Blanca hará un anuncio al respecto, indicando que la actual ley necesita ser reexaminada primero, para despúes elaborar una nueva legislación.