Durante la tormenta del pasado martes en el valle de Orizaba el 50 por ciento de los encharcamientos y anegaciones fueron provocados por la basura en las calles que llegó arrastrada desde los municipios vecinos de La Perla, Mariano Escobedo, Atzacan e Ixhuatlancillo.
De las toneladas de desechos que se generan en las cuatro poblaciones vecinas el 20 por ciento está en las calles y el 80 por ciento restante está en basureros.
Cuando los desperdicios se tiran de manera desordenada, obstruyen la corriente de agua de lluvia, propiciando su estancamiento, lo que genera un foco de infección y, a su vez, un peligro para la salud.
En una infografía, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) pide a la ciudadanía mantener las coladeras limpias para evitar que se tapen, depositar los restos en su lugar, no arrojarlos a espacios públicos, alcantarillas, barrancas y ríos.
Los encharcamientos en Pluviosilla fue a causa de la acumulación de desechos sólidos, troncos, ramas y piedras de municipios vecinos, dijo el alcalde Juan Manuel Diez Francos.