La devastación causada por el huracán “María” en Puerto Rico provocó que gran número de sus habitantes literalmente huya hacia a Miami.
Tras una semana sin energía eléctrica, agua, ni combustible suficiente, la decisión de muchos es hacer caso a sus familiares que les ofrecen albergue.
Además, conforme al medio local Primera Hora, se han registrado robos de ropa, comida y contenedores con gasolina, estos últimos probablemente comprados antes de la llegada del huracán.
Cerca del 97 por ciento de los 3.4 millones de habitantes de la isla aún está en la oscuridad y la mitad de los residentes no tiene agua”, admitió el gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, en entrevista con la cadena CNN.
Los boricuas pueden viajar libremente a través de Estados Unidos porque, al ser la isla Estados Libre asociado, son ciudadanos estadunidenses.
Los puertorriqueños que lograron llegar el miércoles al Aeropuerto Internacional de Miami eran afortunados, ya que los paneles de vuelos de la terminal procedentes de Puerto Rico mostraron varios cancelados.
Autoridades de Florida se preparan ante la posibilidad de un éxodo masivo de puertorriqueños, al igual que escuelas como el Miami Dade College (MDC) y la Universidad Central de Florida (UCF).
Los miembros de una familia recibieron con llanto a sus seres queridos en las áreas de equipaje de la terminal.
Gloria Bonnet, quien llegó junto a su hijo, no podía aguantar las lágrimas de felicidad de ver a sus familiares.
Bonnet tuvo que esperar cinco días en el aeropuerto de San Juan para poder viajar y describió la escena en aquella terminal como “un caos, una pesadilla”.
Señaló que en la isla no tienen luz ni agua, por lo que está considerando seriamente en quedarse a vivir en Miami.
La restauración de los servicios esenciales y el transporte de artículos de primera necesidad logró llevar posiblemente la mayor presencia militar a la isla relacionada con trabajos de emergencia y alivio de desastres.
Según detalló el director ejecutivo de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias local (FEMA por sus siglas en inglés), Alejandro de la Campa, para atender las emergencias, el Departamento de Defensa estadunidense activó a miles de militares de diversas agencias federales.
Esta es la vez que mayores recursos se están solicitando a FEMA», afirmó De La Campa en rueda de prensa.
Esta presencia militar es una operación normal tras una emergencia», aseguró.
Rosselló, por su parte, sostuvo que la ayuda militar fue solicitada por él en colaboración con FEMA, y cuyos esfuerzos son para el transporte, ingeniería y seguridad, entre otros componentes
Puerto Rico, de igual modo, espera la llegada entre este fin de semana o principios de la próxima del buque hospital USNS Comfort, que tiene la capacidad para atender a mil pacientes.