Al menos 107 hipopótamos han muerto desde el pasado día 2 hasta ahora debido a un brote de carbunco -enfermedad también conocida como ántrax maligno- en el parque nacional de Bwabwata, en el noreste de Namibia, informan medios locales.
Los guardias del parque descubrieron decenas de cadáveres de hipopótamos en las aguas del río Kavango, por lo que funcionarios del Ministerio de Medio Ambiente y Turismo de este país del suroeste de África enviaron a un grupo de veterinarios para verificar la causa de las muertes masivas.
El director de parques y gestión de fauna del Ministerio, Colgar Sikopo, aseguró que esto es una “situación natural” y que la gente “no debería preocuparse” ya que no va a afectar al turismo en la zona”, en declaraciones recogidas por el diario New Era.
“Esto ya ha pasado en Zambia, ocurre principalmente cuando el nivel del río está bajo”, añadió, y explicó que también sucedió dentro de las fronteras namibias en 2003 y en 2004, en el parque de Kasika, donde afectó a hipopótamos y elefantes.
La bacteria Bacillus anthracis, responsable del carbunco o ántrax maligno, se acumula en zonas de aguas estancadas como las que se forman en este parque cuando el nivel del Kavango baja, por lo que los hipopótamos son proclives a contraer la dolencia debido a su naturaleza semiacuática.
Las autoridades están intentando incinerar todos los cadáveres que encuentran, y han emitido una alerta para que las más de 5.500 personas que viven dentro de los límites del parque no consuman la carne de los animales muertos ni entren en contacto con ellos, ya que podrían contagiarse de la enfermedad.
Esta bacteria es la misma que se utilizó en los ataques contra diversos medios de comunicación y senadores estadounidenses en 2001, a los que se envió cartas que contenían esporas de carbunco, causando la muerte de cinco personas.