La cuarta ronda de renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) comenzó hoy a las afueras de Washington en medio de preocupaciones de Canadá y México sobre el futuro de las conversaciones ante las exigencias planteadas por EE.UU.
Al inicio de las reuniones, que tienen lugar en Arlington (Virginia), el representante de Comercio Exterior de EE.UU., Robert Lighthizer, dio la bienvenida al secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, y a la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Chrystia Freeland, al señalar que les esperan varios días “de trabajo duro”.
De hecho, estaba previsto que esta ronda concluyera el próximo 15 de octubre, pero hoy Lighthizer anunció que se prolongará dos días más, hasta el 17, para permitir un “tiempo adicional” de negociaciones.
La renegociación del TLCAN, en vigor desde 1994, ha sido impulsada por el Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, quien ha calificado el acuerdo de “desastre” y desventajoso para su país.
La tercera ronda de negociaciones se produjo en Ottawa (Canadá) a finales de septiembre y terminó sin avances en los temas más conflictivos.
Trump busca, entre otras cosas, reducir drásticamente el déficit comercial que mantiene EE.UU. con México (más de 63.000 millones de dólares anuales), y en menor medida con Canadá, así como encontrar fórmulas para que el acuerdo genere más empleos en el país.
Las últimas propuestas del Gobierno de Trump en el marco de la renegociación han causado preocupación entre sus socios en el TLCAN y los expertos.
Una de ellas es la llamada cláusula “sunset”, que obligaría a revisar el tratado de manera sistemática cada cinco años y haría que quedara suspendido si alguno de sus tres miembros no estuviera de acuerdo en extenderlo.
Además, EE.UU. aboga por poner fin a los “subsidios injustos” que, a su juicio, perjudican a sus exportaciones y quiere modificar los mecanismos de solución de controversias dentro del pacto.
La propia Cámara de Comercio de Estados Unidos ha calificado de “altamente peligrosas” las propuestas del Gobierno de Trump ante esta nueva ronda de conversaciones.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha iniciado una gira de cuatro días por EE.UU. y México para abordar precisamente con sus homólogos de ambos países el estado de las negociaciones sobre el TLCAN.
Trudeau se reunirá hoy con el presidente estadounidense, Donald Trump, en la Casa Blanca y después viajará a México para entrevistarse con su homólogo de ese país, Enrique Peña Nieto.
Para Monica de Bolle, experta del Instituto Peterson, la visita de Trudeau a Washington es una señal de que tanto Canadá como México se están preparando para una “explosión” en las negociaciones o, más probablemente, para que “queden en nada”, lo que en última instancia puede llevar a que el TLCAN “se desmorone gradualmente” durante los próximos años.
Así lo indicó De Bolle a Efe al anotar, por otro lado, que no considera viable el objetivo de culminar la renegociación antes de final de año, como se habían marcado las partes.
“Si no hay una intención real de limar las diferencias de México y Canadá con Estados Unidos, estas negociaciones se harán eternas”, pronosticó la experta.
En una comparecencia este martes ante el Senado, el secretario de Exteriores de México, Luis Videgaray, dejó claro que “hay cosas” que su país no va a “aceptar” en la renegociación del acuerdo.
Videgaray sostuvo, además, que “no sería el fin del mundo” que México abandonara el TLCAN y que el país tiene que estar preparado “para decir que no” e “incluso” salirse del pacto si lo considera necesario.