Lugar:
Fuente:
EFE

El número de decesos por los incendios en el norte de California aumentó hoy a 29, en uno de los peores incendios en la historia de esta entidad, reportaron autoridades locales.

Funcionarios locales dijeron que comenzó la búsqueda de más cuerpos entre las cenizas de las comunidades destruidas. Equipos con perros entrenados rastrean la zona afectada.

Las autoridades confirmaron el descubrimiento de cuatro cuerpos más. Del total de 29 muertes, 15 estaban en el condado de Sonoma, ocho en el condado de Mendocino, cuatro en el condado de Yuba y dos en el condado de Napa.

El sheriff de Sonoma, Robert Giordano, dijo en rueda de prensa que las búsquedas pueden llevar horas, y la identificación será difícil.

«Tenemos que enfrentar esto con fuerza y hacerlo», dijo el jefe de bomberos de Santa Rosa, Tom Gossner, a cientos de bomberos que luchaban contra el devastador incendio de Tubbs, en Santa Rosa.

Hasta el jueves por la mañana, el personal estimó que dos mil 834 casas fueron destruidas sólo en la ciudad de Santa Rosa, junto con cerca de 400 mil pies cuadrados de espacio comercial, señaló el alcalde de Santa Rosa, Chris Coursey.

Las autoridades y bomberos temían que los vientos de 70 kilómetros por hora previstos para la mañana de este jueves agitaran aún más las llamas hacia las zonas residenciales, que hasta ahora habían escapado al fuego.

El portavoz de Cal Fire, Richard Cordova, dijo que las brigadas contra el fuego permitieron establecer un 10 por ciento de contención en torno al incendio de unas 14 mil hectáreas en Tubbs.

El jueves por la mañana, Calistoga seguía siendo un pueblo fantasma, aparte de unas pocas docenas de residentes que se quedaron atrás y un centro de comando de incidentes de Cal Fire en el géiser Old Faithful de la ciudad.

En todo el estado, 30 camiones cisterna, casi 75 helicópteros y 550 bomberos con varios miles de bomberos ya han sido puestos en servicio. Los funcionarios estatales han solicitado más de 300 camiones adicionales de otros estados y el gobierno federal.

Los incendios forestales de California podrían haber sido provocados por las líneas eléctricas. Los funcionarios estatales aún no han dicho oficialmente qué causó los incendios, que destruyeron al menos tres mil 500 hogares y empresas.