El sobrepeso de casi una tonelada provocaron el derrumbe de un edificio en el colegio Enrique Rébsamen, que dejó 19 niños muertos y 7 adultos, el pasado 19 de septiembre en el sismo de 7.1 grados.
Así lo revelaron peritajes que ordenó la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, los cuales se agregaron a la carpeta de investigación TLP-2/UI-3C/D/1695/09-2017.
En 2016, la directora del colegio, Mónica García Villegas, mandó a construir fuera de la norma un cuarto nivel, cuyo piso era de porcelanato, material difícil de malear y que necesita de una buena estructura para ser soportado.
El sobrepeso provocó que la estructura no aguantara y que con el temblor se vencieran y el edificio se deslizara hacia la parte donde los alumnos, maestros y empleados se concentraron para resguardarse de un derrumbe.
De acuerdo con el reporte de los 17 peritos especialistas en arquitectura, fotografía y construcción, el departamento tenía un peso total de 976.50 kilogramos y que los castillos de la estructura original no fueron construidos para soportar todo ese excedente.