La selección de Argentina completó su primer entrenamiento con vistas a los amistosos que disputará en Rusia, el sábado ante la anfitriona y el próximo martes frente a Nigeria.
Los barcelonistas Messi y Mascherano fueron los últimos en saltar al campo en la base de entrenamiento del Spartak Moscú en las afueras de la capital rusa.
Pocos minutos después de arrancar el entrenamiento, Messi se colocó una bufanda para cubrirse cuello, boca y orejas, aunque las temperaturas rondaban los 5 grados sobre cero en el otoño moscovita.
A la estrella argentina se le vio poco activo y departiendo con su amigo Sergio Agüero, que volvió a la selección tras convertirse en el máximo goleador de la historia del Manchester City.
El entrenamiento comenzó con casi una hora de retraso sobre el horario previsto debido a que el autobús con el combinado latinoamericano se vio afectado por un atasco, lo que enfadó a la prensa local.
El sábado la selección argentina se enfrentará a la anfitriona, Rusia, en un partido que servirá para inaugurar el renovado estadio Luzhnikí, que acogerá el partido inaugural y la final del Mundial.
Según informó Vitali Mutkó, presidente de la Unión de Futbol de Rusia (UFR), ya se han vendido más de 60 mil entradas para dicho encuentro, cuando el aforo del estadio es de más de 80 mil.
Messi ya viajó a Moscú con Argentina en 2009, cuando la Albiceleste estaba dirigida por Diego Armando Maradona, pero entonces no pudo jugar al sufrir una contractura en el entrenamiento previo.
El técnico argentino, Jorge Sampaoli, no convocó a Gonzalo Higuaín, que pierde enteros para disputar el Mundial de Rusia, y descartó al delantero más en forma del momento en Italia, Mauro Icardi, que se lesionó el fin de semana con el Inter.