Las elecciones de 2018 estimularán el crecimiento económico de México, cuyo Producto Interno Bruto (PIB) podría aumentar un 2.5%, aunque persiste la incertidumbre por el resultado de la negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), coincidieron analistas consultados por EFE.
La previsión optimista del PIB para 2018 supondría una mejora con respecto al 2017, pues la última estimación del Banco de México (Banxico), incluida en el Informe Trimestral de julio-septiembre, indica que crecerá del 1,8 al 2,3% este año.
Ratifica EU compromiso con modernización del TLCAN
Gabriela Siller, directora de Análisis Económico y Financiero en Banco Base, afirmó que el crecimiento será «consecuencia de un mayor gasto del gobierno y también habrá un alza en la confianza del consumidor».
Por su parte, Delia Paredes, directora ejecutiva de Análisis Económico de Banorte, estimó que las elecciones también incidirán en la creación de empleo, continuando con la tendencia positiva de 2017.
Es un año (2018) con retos bastante importantes, el punto es que nosotros prevemos que al final estos riesgos se van a resolver y se van a disipar», dijo.
Con respecto al resultado de los comicios, Paredes confió en que los mercados y la realidad social del país frenarán un cambio de timón radical en la política económica.
Actualmente, el peso mexicano está teniendo un cierre de año complicado: el dólar se vende en 19,73 unidades en el mercado interbancario.
Todo indica que la volatilidad de la moneda continuará en 2018. En enero, con el regreso de liquidez al mercado financiero, el peso podría apreciarse, pero habrá que esperar a que termine la sexta ronda del TLCAN a mediados del mes para comprobar cómo evoluciona.
Las analistas consultadas concuerdan en que el dólar podría superar las 20 unidades a mediados de 2018.
Qué tanto se depreciaría dependerá del resultado de las elecciones «sobre todo si algún candidato se pronuncia en contra de la reforma energética», declaró Siller.
En términos de inflación, se prevé una disminución comenzando el próximo año, gracias a que el precio de la gasolina ya está liberalizado y no se tendrán los efectos del «gasolinazo» que ocurrió a principios de 2017, comentó Paredes.
Al concluir 2017, Banxico anunció en la minuta de su más reciente junta de gobierno que la inflación general anual será superior al 6,63%, muy por encima de la meta del 3%.
El pronóstico de Siller para 2018 es cerrar la inflación alrededor del 5,1%. Hasta el 2019 no se estima que llegue al objetivo establecido por Banxico.
En lo que respecta a la Inversión Extranjera Directa (IED), la renegociación del TLCAN provocó que disminuyera un 11% durante 2017. En 2018 podría haber también un decrecimiento de entre el 10% y 15%, aseguró Siller.
En 2017, la baja se vio compensada por la entrada de capitales por la reforma energética: «si no fuera por eso, la IED hubiera caído alrededor del 30%», agregó.
Por otra parte, la recién aprobada reforma fiscal en Estados Unidos podría tener efectos sobre la economía mexicana, pero no serán inmediatos para el próximo año, sino que se espera que sea a largo plazo cuando se perciba una disminución importante en la IED, advirtieron las analistas.
Esto es por la disminución de la tasa de repatriación de capitales (…) las empresas (estadounidenses) que están en territorio mexicano y que tienen efectivo u otros activos, se verán incentivadas a repatriarlos», afirmó Siller.
Paredes argumentó que dicho escenario debe motivar al gobierno de México a plantear una reforma fiscal propia.