Las negociaciones para la renovación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) avanzan “lentamente” en Montreal a la espera de que el próximo lunes lleguen los responsables políticos de Canadá, México y Estados Unidos.
El jefe negociador de la provincia canadiense de Quebec, Raymond Bachand, declaró hoy a los medios de comunicación que las negociaciones están progresando “lentamente” y que Canadá ha presentado propuestas “innovadoras” para intentar convencer a Estados Unidos de que mantenga en vigor el acuerdo.
“Se está avanzando constante pero lentamente en muchos asuntos técnicos, que son la base del comercio. En los más espectaculares, Canadá ha sido muy innovadora al poner ideas para intentar llegar un acuerdo”, declaró Bachand.
Los temas más contenciosos se centran en estos momentos en tres puntos: el sector automotriz, la inclusión de una cláusula para renovar cada cinco años el TLCAN y el Capítulo 11 sobre resolución de disputas comerciales.
Según filtraciones dadas a conocer hoy por medios de comunicación canadienses, las conversaciones están rodeadas de una gran incertidumbre porque los negociadores de Estados Unidos no han expresado ninguna opinión sobre las propuestas de Canadá y México.
Al parecer, Estados Unidos no responderá a las propuestas hasta que el lunes se reúnan en Montreal los responsables políticos de los tres países: la ministra de Asuntos Exteriores canadiense, Chrystia Freeland; el secretario de Economía de México, Ildefonso Guajardo, y el responsable comercial de EU, Robert Lighthizer.
Hoy, un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Canadá confirmó a Efe que, aunque los negociadores terminarán sus trabajos el domingo, tal y como estaba previsto inicialmente, el tradicional comunicado final sobre la ronda no se dará a conocer hasta que se reúnan el lunes Freeland, Guajardo y Lighthizer.
El retraso de la publicación del comunicado final refuerza la idea de que los negociadores estadounidenses tienen que esperar a que Lighthizer apruebe los resultados alcanzados en la ronda, que en teoría tiene que ser la penúltima de las negociaciones.