El Gobierno sirio tachó hoy de «falsas» las acusaciones realizadas por Estados Unidos en las que afirmaba que Damasco había utilizado repetidamente gas cloro en sus ataques contra la oposición, así como un posible uso reciente de gas sarín.
En un comunicado, reproducido la agencia oficial de noticias siria, SANA, el Ministerio de Exteriores señaló que las declaraciones de Estados Unidos son «falsas» y «no son más que mentiras basadas en estudios inventados por ellos».
Aseguró, además, que estas acusaciones se producen tras «el fracaso de Washington» en el Consejo de Seguridad, en alusión al cruce de acusaciones entre Rusia y Estados Unidos en la ONU el pasado 23 de enero.
Por último, Damasco reiteró que Estados Unidos no tiene «evidencias» que confirme el uso de gas cloro y de sarín.
Ayer, el secretario de Defensa de Estados Unidos, James Mattis, afirmó que Damasco ha utilizado repetidamente gas cloro en sus ataques contra la oposición y apuntó que, además, se está investigando el posible uso de gas sarín, lo que podría llevar al Pentágono a tomar medidas.
Estamos más preocupados aún por el posible uso de gas sarín. No tengo evidencias, pero lo que digo es que otros grupos que se encuentran sobre el terreno -como organizaciones no gubernamentales y combatientes- han dicho que se ha usado sarín y estamos buscando evidencias», comentó Mattis.
Las declaraciones de Mattis se producen dos días después de que el Departamento de Estado anunciara que está investigando un posible nuevo ataque con armas químicas contra la población de Guta Oriental, el principal bastión opositor de la periferia de Damasco.
De confirmarse las acusaciones, surgidas a raíz de una investigación periodística, se trataría del tercer ataque de este tipo sobre esta localidad en solo treinta días.
En abril de 2017, Estados Unidos llevó a cabo una acción militar contra el Gobierno de Bashar al Assad, en respuesta a un ataque químico similar, y sus Fuerzas Armadas bombardearon la base aérea de Shayrat.