Para un choapense, cuyo salario oscila entre los 120 y 180 pesos al día, costear el tratamiento de enfermedades crónico-degenerativas y auto inmunes, se vuelve algo imposible a no ser que cuente con la cobertura del Seguro Popular, pues hay medicinas cuyo costo, como el caso de los retrovirales y oncológicos superan varios miles de pesos.
La medicina privada en México es cara, los medicamentos para tratar el cáncer, Hepatitis C, Osteoporosis, o el VIH, llegan a tener un costo de hasta 600 mil pesos, explicó el médico Luis Cortázar Castellanos, director de la Clínica Guadalupana.
El especialista, expuso que los bajos salarios repercuten en quienes no tienen la cobertura de algún seguro médico y que para quienes tienen un familiar o ellos mismos padecen una enfermedad incurable, se vuelve algo imposible de sufragar.
Explicó que las investigaciones para desarrollar nuevos medicamentos, continúa, y el sector público no tiene acceso a ellos todavía, “la patente tiene mucho que ver, la economía de cada país, porque muchos de estos nuevos medicamentos se elaboran en otros países”, externó.
“Hay nuevos medicamentos para la Hepatitis C, que el sector salud lo cubre, pero aún no cuenta con medicina que efectivamente la combate y que además reduce el riesgo de cáncer en el hígado porque son nuevas investigaciones y son tratamientos costosos”, explicó.
En México, algunos medicamentos para el tratamiento del cáncer, en la medicina privada, como el caso del Glivec, de laboratorios NOVARTIS, cuyo contenido Imatinib, sirve para tratar ciertos tipos de leucemia (cáncer que empieza en los glóbulos blancos) y otros cánceres y trastornos de las células sanguíneas, tienen un costo de alrededor de 16 mil 700 pesos, tan sólo una caja cuyo contenido es de 60 comprimidos.
Otro ejemplo, de lo costoso de estos medicamentos es la Sandostina Lar, cuyo compuesto Octreotide, se emplea para tratar los signos y síntomas que ocurren secundariamente a un tumor carcinoide, que invade el intestino delgado, llega a tener un costo de 29 mil 546 pesos, en su presentación de un frasco ámpula de 30 miligramos.
En el caso del medicamento Yervoy, de Laboratorios Brystol-Myers Scuibb, indicado para el tratamiento del cáncer, o melanoma avanzado (irresecable o metastásico) en adultos y adolescentes de 12 años y mayores en su presentación de solución inyectable de 10 mililitros de Ipilimumab, tiene un costo en México de 76 mil, 477 pesos.
En el caso de los antivirales como el Reyataz, medicamento que controla la infección por el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) paralizando a una proteína que el virus necesita para multiplicarse, en su presentación en frasco con 30 capsulas de atazanavir, de 300 miligramos, su costo es de aproximadamente 6 mil 593 pesos.
“Aunque se trata de prevenir, con el Centro de Salud, lamentablemente es poco el recurso, y aparte el gobierno no quiere absorber la capacidad de atención a toda la población con medicina preventiva, hablamos de que se tendría que poner un médico por cada cuadra, pero eso involucra gastos del edificio, pago del médico, medicina”, añadió Luis Cortazar.
“Algunos optan por comprar medicamento genéricos, que ciertamente tienen el compuesto, pero no llevan el mismo control de calidad, puede que te indique que contiene cierta cantidad, pero no completa a diferencia de los medicamentos de patente”, expuso.
El director del hospital “Pedro Coronel Pérez”, Hiram Vela Bravo, dijo que el Seguro Popular cubre los medicamentos que se emplean en el tratamiento a enfermedades como el cáncer, Sida, VIH, Hepatitis y otras enfermedades que son catalogadas dentro de la cobertura de gastos catastróficos.
“Se dan siempre y cuando haya una justificación para evitar la venta de estos de forma inadecuada, y va dependiendo de niveles, es decir, que un especialista en el tratamiento de cáncer es quien puede proporcionarlos, por el nivel de atención es el medicamento que se va a otorgar”, explicó Vela Bravo, en relación al tema de los medicamentos más costosos.
