Cinco elefantes murieron arrollados por un tren el sábado pasado y el siniestro desató una guerra de culpas entre el Departamento Forestal del estado oriental indio de Assam y la administración de la empresa de ferrocarril Northeast Frontier Railway (NFR), reportó la prensa india.
La locomotora descarriló, pero no hubo heridos entre los pasajeros.
Los hechos ocurrieron a las 21:40 hora local y según reportes de funcionarios forestales el maquinista del convoy ignoró las señales, por lo que el tren impactó a gran velocidad contra una manada que cruzaba las vías.
De acuerdo con las autoridades forestales hay un corredor de elefantes que está señalizado entre las estaciones de Hawaipur y Lamshakhan. Sin embargo, funcionarios de la NFR indicaron que esa sección no está delimitada.
Los maquinistas declararon que tres paquidermos de corta edad no se movieron de las vías y los otros dos, de edad adulta, comenzaron a rodearlos cuando se produjo el accidente. Cuatro murieron al instante y el otro falleció este lunes.
Una línea ferroviaria atraviesa el 13 por ciento de los corredores de elefantes del noreste del país. Aunque la NFR dijo que el percance del pasado sábado no ocurrió en uno de ellos, los funcionarios forestales recordaron que enviaron una lista con 19 lugares donde hay presencia de elefantes en esa zona.
La NFR se manifestó interesada en aminorar la mortalidad de elefantes en las vías férreas, pero también dijo que se debe garantizar la seguridad del tren.
Datos de la División de Vida Silvestre del Departamento Forestal de Assam indican que la electrocución, el impacto de trenes y el ataque de los aldeanos mataron a 40 paquidermos el año pasado. No obstante, a pesar de estas muertes la población aumentó de 5 mil 246 en el 2002 a 5 mil 719 en el 2017.