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Los pescados y mariscos son los alimentos de mayor consumo durante la Cuaresma, su preferencia es parte del cumplimiento del tiempo litúrgico, previo a la Pascua.

Estos productos tienen un alto valor nutricional, y de fácil digestión.

A la veracruzana, a la plancha, al acuyo o empapelado, son lagunas de las opciones para su preparación, explicó Roberto Muñoz Joachin, jefe del área de nutrición del Hospital de Alta Especialidad de Veracruz.

“Los pescados que son brillosos, que son tipo charales, las sardinas, estos tienen mayor cantidad de calcio, fosforo y magnesio, indudablemente eso ayuda al sistema nervioso, ayuda al fortalecimiento de los huesos, (…) en el caso del salmón, el bonito, el robalo son los pescados que si producen el omega 3”.

Tras su captura de no consumirse de manera inmediata, el pescado debe mantenerse a tres grados bajo cero, para evitar su descomposición.

Aunque los platillos a base de mariscos crudos son atractivos también al paladar como el ceviche, estos no son recomendables por el grado de riesgo a adquirir una enfermedad gastrointestinal.

“Por eso siempre se pide que se cueza, que pase sobre la lumbre, al igual los maricos, al hablar del camarón, la jaiba, el pulpo, que son tradicionales en el estado de Veracruz y acompañarlo con un buen carbohidrato, con una rebanada de pan, con una ensalada”

Al momento de comprar alguna especie de pescado, observe que las agallas estén rojas, que las escamas no se desprendan con facilidad, que los ojos estén cóncavos, es decir que sobresalgan y que la carne no sea gelatinosa, esto garantizará que el producto está fresco.