Científicos mexicanos descubrieron un nuevo uso del mucílago del nopal, una especie de cactus emblemática de México, para elaborar cosméticos y productos dermatológicos, informó hoy la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La combinación de la baba de nopal con compuestos de tipo glicerol, propilenglicol y sorbitol ocasiona un efecto sinérgico humectante de calidad mayor a otros productos dermatológicos como el aloe vera.
“Al comparar sus propiedades con el humectante natural más consumido en el mundo (aloe vera), muestra mayor retención de humedad en la piel, es más económico y mayormente disponible en cuanto a su extracción industrial”, indicó la institución en un comunicado.
El mucílago es un polímero natural que forma una película imperceptible en la piel capaz de retener agua, contener por mayor tiempo los humectantes y evitar la pérdida de líquido por tiempos prologados.
Para evaluar los resultados, los investigadores de la Facultad de Estudios Superiores Cuautitlán, centro asociado a la UNAM, evaluaron la pérdida de agua transepidermal, un proceso natural del cuerpo que varía entre cada persona y depende de las actividades que realice.
Las mediciones confirmaron que la cantidad de agua que la piel conservaba era mayor cuando se empleaban el mucílago y glicerol juntos que en su uso por separado.
Las aplicaciones de esta creación son diversas, dado que puede ser utilizada para la preparación de composiciones cosméticas y dermatológicas.
El nopal -que además es considerado un árbol cósmico en la mitología azteca y el tipo de cactácea más abundante del país- ha sido uno de los elementos más importantes de la herbolaria mexicana, probando su eficacia como regenerador del tracto gastrointestinal.
El doctor David Quintanar, líder de la investigación, constató que la baba del nopal es un objeto de estudio de profundo impacto para el desarrollo social no solo por las propiedades mencionadas anteriormente, sino por sus posibilidades para la construcción de sistemas de liberación de fertilizantes y otros compuestos de interés agrícola.
“Es un polímero biodegradable que al colocarse bajo la tierra liberará lentamente los materiales ofreciendo un efecto continuo y una degradación natural dentro del suelo”, señaló el experto.