En medio de tremendas protestas de lideres de su propio Partido Republicano, Donald Trump reiteró ayer que no se retractará de su plan de imponer aranceles a las importaciones de acero y aluminio. No obstante, la casa Blanca estaba ideando formas de suavizar el efecto de las medidas sobre socios comerciales importantes. Las intensas presiones probablemente aplazarán cualquier presentación formal de los gravámenes haya la semana próxima, según han han dicho algunos funcionarios. La información es de Ana Swanson en Nueva York Times y la publica Reforma… Son estrategia de Trump para conseguir mejores condiciones para su país en el TLC.