Chile dio un giro a la derecha el domingo con la asunción del presidente Sebastián Piñera, que derrotó por una gran diferencia a la coalición de centroizquierda de la saliente mandataria Michelle Bachelet.
Ambos se han alternado en la presidencia con dos mandatos cada uno entre 2006 y 2018.
La del domingo es la segunda ocasión en que Bachelet le entrega el poder al multimillonario ingeniero comercial.
Cumpliendo un estricto protocolo, Bachelet llegó 15 minutos antes del mediodía al Congreso, en el vecino puerto de Valparaíso, a bordo de un vehículo descubierto, en medio de algunos gritos de “presidenta la amamos” y “Gracias presidenta”.
Minutos después del mediodía la mandataria se sacó la banda presidencial y una insignia de mando y se los pasó al recién electo presidente del senado, el socialista Carlos Montes, quien procedió a investir a Piñera.
Entre los más de mil 300 invitados a la ceremonia estaban los presidentes de Argentina, Mauricio Macri; Bolivia, Evo Morales; Brasil, Michel Temer; Ecuador, Lenín Moreno; Honduras, Juan Orlando Hernández; México, Enrique Peña Nieto; Perú, Pedro Pablo Kuczynski y el rey emérito Juan Carlos 1 de España.
Tras un fuerte “sí juro” y luego que Piñera recibiera la banda presidencial y una insignia dorada, quedó instalado como el mandatario, que gobernará hasta 2022, quien procedió a tomar juramento a sus 23 ministros.
Piñera llega al poder apoyado por la coalición Chile Vamos, integrada por la conservadora Unión Demócrata Independiente (UDI), la centroderechista Renovación Nacional (RN) y dos colectividades menores. La UDI y RN fueron el sustento político de la dictadura del general Augusto Pinochet entre 1973 y 1990.
Su principal desafío es alinear a su coalición”, dijo el sociólogo y analista político Miguel Zlosilo, en alusión a Chile Vamos, que en el pasado ha actuado más como pacto electoral que como coalición política y a la que Piñera exhortó a trabajar unida.
Hay que ver si efectivamente la derecha, por primera vez en la historia tiene capacidad de trabajo en equipo… y proyectarse para un siguiente período”, añadió.
Piñera, de 68 años, prometió retomar el crecimiento económico, impulsar las ralentizadas inversiones, mejorar los empleos y la seguridad pública e impulsar leyes que protejan a la infancia y regulen la creciente inmigración extranjera.
Durante el segundo mandato de Bachelet, entre 2014 y 2018, el crecimiento económico cayó a un promedio del 2%.
Piñera afirma que la experiencia adquirida en su primer gobierno, entre 2010 y 2014, le servirá para buscar acuerdos nacionales con una fraccionada centroizquierda.
Desde el día uno Piñera va a querer demostrar que con él la rueda de la economía volvió a girar”, dijo a Cristóbal Bellolio, profesor de la Escuela de Gobierno de la Universidad Adolfo Ibáñez.
Durante su primer gobierno Chile creció un 5.3% y creó un millón de empleos, empujados por la reconstrucción del centro sur chileno, devastado dos semanas antes de que asumiera el mando por un terremoto de magnitud 8.8 seguido de un devastador tsunami.
Aunque Piñera derrotó al candidato de centroizquierda Alejandro Guillier con el 54% de los votos, frente al 45% de su rival, tendrá un congreso sin mayorías.
Deberá asumir, con o sin modificaciones, una serie de proyectos que Bachelet dejó en el congreso, incluido uno de matrimonio igualitario que para Piñera es inaceptable porque afirma que éste sólo debe ser entre un hombre y una mujer.
También deberá abordar reformas educacionales pendientes con las que Bachelet logró favorecer al 60% de los estudiantes universitarios más pobres y que aspiraba a alcanzar la gratuidad universal, rechazada por Piñera, quien sin embargo no cuenta con la mayoría necesaria para deshacer las modificaciones emblemáticas de la saliente mandataria.
Creo que vamos a estar en una lógica más menos de obrar sobre lo construido, por una parte, y por otra hacer una serie de ajustes a reformas que no están bien hechas”, concluyó Bellolio.
Entre las reformas que necesitan modificaciones están la tributaria, de educación y laboral, según el analista.
Si (Piñera) logra el alineamiento de su coalición le va a ir bien en todas las materias”, afirmó Zlosilo.