El secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, afirmó que cancelar la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México equivaldría a cancelar el futuro de México, porque generaría pérdidas económicas cuantiosas y desconfianza hacia el país en la comunidad nacional e internacional.
“Pensar en cancelar esto, es prácticamente pensar en cancelarle el futuro a México, y además es un proyecto necesario. Habría una pérdida económica tremenda si no tenemos la capacidad para recibir a los pasajeros, a los hombres de negocios y que quieren venir a México a operar. Hay que darle la oportunidad a México de seguir adelante”, afirmó.
El titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) señaló lo anterior en entrevista, en el marco de la Asamblea General Ordinaria de la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Caniet).
“Cada quien toma sus decisiones, yo las mías, y quien llegue a la Presidencia de la República tendrá que tomar su decisión de qué hacer con los proyectos tan valiosos que estamos dejando. Yo creo que esto, más que un problema de cancelación, es un problema de legado, como lo son las reformas estructurales”, subrayó.
Ruiz Esparza expuso que no podría afirmar o negar si existe la posibilidad real de cancelación de la obra durante la próxima administración federal; sin embargo, señaló que “sin duda, hay un respaldo social por la gran cantidad de empleos que está generando, así como un respaldo financiero porque hay créditos internacionales contratados a través de bonos verdes, así como más de 300 empresas mexicanas participantes”.
La obra conlleva “una especie de blindaje laboral, social y financiero para que se respete el proyecto», dijo, al agregar que de cancelarse el proyecto sin tomar en cuenta esos factores, “no sería un problema para el proyecto, sino un descrédito para el país, desconfianza en México, perderían la fe en México la comunidad financiera internacional y quizás también la comunidad empresarial”.
El funcionario federal manifestó que todo ello conduce a la reflexión respecto a que el nuevo aeropuerto es un proyecto que debe conservarse, porque además “está hecho por los mejores expertos del mundo, nacionales e internacionales, aunado a que se está cuidando hasta el último detalle para que no haya falla alguna”.
Recordó que todas las licitaciones se han hecho con el modelo de contrataciones abiertas que establece la Organización de las Naciones Unidas, además de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), como testigos, así como dependencias, notarios y consejeros independientes que valoran que todo se lleve a cabo con estricto apego a la ley.
“También se ha hablado de cancelar todas las reformas. Aquí estamos viendo el éxito de una de ellas, quizás la que más rápido generó beneficios a los mexicanos y que es la de telecomunicaciones, con un beneficio impresionante reconocido internacionalmente y que hace que hoy todos los países volteen a ver a México”, puntualizó.