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EFE

onald Trump anunció este miércoles el despido del secretario de Asuntos de Veteranos, David Shulkin, quien será reemplazado por su médico oficial, Ronny Jackson.

La salida de Shulkin se rumoreaba desde hacía semanas, porque ese miembro del gabinete había generado titulares por sus conflictos éticos desde julio del año pasado, cuando aprovechó una gira oficial por Europa para acercarse al Reino Unido y asistir al torneo de tenis de Wimbledon.

Este es el tercer ajuste de su gabinete en menos de un mes.

En esa visita, aceptó unas entradas cuyo valor excedía el límite establecido por la Administración en relación con regalos a funcionarios públicos, y en septiembre presionó a la Casa Blanca para que su esposa pudiera acompañarlo a la inauguración de los Juegos Invictus, celebrados en Toronto.

El mandatario estadunidense anunció la salida de Shulkin con un mensaje en Twitter, en el que agradeció al funcionario su servicio al frente de la dependencia.

Estoy encantado de anunciar que pretendo nominar al altamente respetado almirante Ronny L. Jackson, doctor en medicina, como el nuevo secretario de Asuntos de Veteranos», escribió en un tuit.

¡Le estoy agradecido al doctor David Shulkin por su servicio a nuestro país y a nuestros GRANDES VETERANOS!», agregó. 

Estoy orgulloso de nominar al contralmirante, el médico Ronny Jackson, como secretario del Departamento para Veteranos. El almirante Jackson es altamente calificado y capacitado, y como miembro mismo, ha visto de primera mano el enorme sacrificio que hacen nuestros veteranos”, indicó posteriormente Trump en un comunicado.

Jackson ejerció como médico oficial del presidente con residencia permanente en la Casa Blanca, durante el gobierno del presidente George W. Bush.

El despido de Shulkin se dio después de la salida del general H. R. McMaster como asesor de seguridad nacional, la semana pasada.

McMaster fue reemplazado por el exembajador ante Naciones Unidas, John Bolton, quien se destacó como comentarista de la cadena de televisión FOX.

Los ajustes se iniciaron el 13 de marzo, cuando el magnate despidió a Rex Tillerson como secretario de Estado mediante un tuit, igual que en este caso.

Al igual que McMaster, Tillerson tuvo divergencias públicas con el mandatario sobre temas como Corea del Norte que al parecer pesaron en su decisión para reemplazarlo con el exdirector de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Mike Pompeo.