Ganaderos quienes cuentan con ranchos en las orillas del arroyo Agua Dulce, reportaron la muerte de varios animales, aparentemente tras consumir agua de este río que cruza toda la zona urbana del municipio y desemboca en el caudaloso río Tonalá.
Los afectados dieron a conocer a la Asociación Ganadera local que sus animales siempre han tomado agua de este afluente, el cual nace en los límites del municipio donde convergen varios riachuelos más pequeños, justo en el punto donde se ubica la planta Madisa.
Esta empresa, ahora bajo la razón social de Materiales del Istmo S. De R.L. De C.V., se dedica al lavado de arena de sílice y que en innumerables ocasiones ha sido señaladas de contaminar este y otros afluentes de la zona, pues durante el proceso de ‘lavado’ de la arena ocupa grandes cantidades de agua, cuyos residuos terminan en los ríos.
También hay registros de personas afectadas, principalmente ganaderos y ejidatarios quienes tienen contacto con el agua del río, quienes han presentado erupciones en la piel, salpullido y otras lesiones cutáneas, señalando la presunta contaminación del río como causa del problema.
Para determinar que sustancia se encuentra afectado el afluente, la Regiduría comisionada de Fomento Agropecuario solicitó al departamento de Ecología y Medio Ambiente, que tome las muestras necesarias para los exámenes de laboratorio correspondientes.
Las muestras serán tomadas esta semana para determinar lo antes posible la causa de las afectaciones, en años anteriores también se han registrado derrames accidentales de químicos provenientes de ductos de Pemex, por lo que no se descarta que la contaminación tenga su origen en la industria petrolera.