Este fin de semana el nombre de estas deliciosas frituras se volvieron tendencia.
En 1987 nació un pequeño negocio ubicado en el barrio de Tultepec, municipio de Ecatepec, en el Estado de México nació de la mano del Abraham Marcelo González Torres.
Su fundador, y entonces único trabajador ofrecía un único producto que consistía en una fritura a base de harina de trigo con sal y chile, que eran comercializadas en la Central de Abastos de la Ciudad de México.
“Un ejército de un solo hombre”, la empresa se enfrentó a una competencia de mercado enorme, pero su fundador encontró en la apuesta un nicho de mercado creciente. Con el tiempo, ese pequeño negocio encontró la forma de expandirse, hasta que la empresa denominada “Fritos Totis”, abrió su primer fábrica en forma, en 1994.
La sede principal de la compañía, hasta el día de hoy se encuentra en el municipio de Tizayuca, en el estado de Hidalgo. De acuerdo con la tesina publicada por la Universidad Nacional Autónoma de México, “Campaña de publicidad para la marca de botanas Totis”, cuyo autor es Aldo González Martínez, esta época significó el crecimiento de la marca, que comenzó a distribuir a nivel nacional.
El abanico de productos creció y se añadió la “Donita con sal y limón”, el rápido crecimiento de la marca le permitió posicionarse debajo de Sabritas y Barcel.
Este crecimiento a nivel nacional, impulsaron a la marca a abrir otra fábrica en el estado de Chiapas. Desde donde se buscaría exportar sus productos a centro y Sudamérica, en búsqueda de internacionalizar la marca.
El entonces presidente de México, Vicente Fox Quesada dijo en el evento: “Felicitaciones a este equipo de jóvenes, de la empresa Totis. Estoy seguro que van a dar un gran impulso a la competitividad, calidad y excelencia a esta empresa en el sureste de México. Seguramente serán un éxito exportando sus productos hacia Centroamérica”.
En 2005 todo parecía augurar un crecimiento importante, pues también se adentraron en el mercado estadunidense al participar en la Expo Comida Latina Los Ángeles 2005. Para comercializar en ese país debieron modificar algunos procesos.
Los siguientes años significaron un crecimiento de su presencia en el mercado, y la comercialización de nuevos productos, hasta 2012 cuando se integró a La Costeña.
En 2013 apostaron por la integración de un producto a base de papa frita, y para 2017 adquirieron otra botana conocida en México, los cacahuates japoneses NIPON.
La expansión de la empresa trajo consigo mayor inversión y grandes riesgos. Actualmente se están marcando rumores (a falta de un comunicado oficial de la empresa), de que la compañía se encuentra en bancarrota y anunció a sus trabajadores el cierre de la fábrica en Chiapas.
De ser cierto, estaríamos ante un revés financiero para una de las empresas más emblemáticas en las recientes décadas para los mexicanos.
Pero hay que recordar que la sede principal de Totis se encuentra en Hidalgo. Lo que no significaría necesariamente el cese total de operaciones de la marca. Pronto les tendremos más noticias, en cuanto la marca responda a Dinero en Imagen.