El jefe de gabinete del presidente Donald Trump, el general retirado John Kelly, se pronunció hoy por incluir a cientos de miles de inmigrantes centroamericanos en la ruta a la ciudadanía estadounidense.
La administración Trump anunció este viernes la cancelación del programa de Estatus de Protección Temporal (TPS) para inmigrantes hondureños, como antes lo había hecho para salvadoreños, nicaragüenses y haitianos, entre otros.
Kelly, quien fue secretario del Departamento de seguridad Interna (DHS) antes de ser el jefe de gabinete de la Casa Blanca, defendió en ese sentido la decisión de su sucesora y aliada política Kirstjen Nielsen, de poner fin al TPS.
“Al hacerlo, la secretaria está una vez más forzando al congreso de los estados unidos a hacer algo”, señaló.
A menos que el legislativo estadounidense apruebe algún alivio migratorio para los beneficiarios del TPS, los hondureños deberán salir del país en enero del 2020, salvo en los casos donde el inmigrante tenga una alternativa legal para permanecer en Estados Unidos.
Kelly señaló que la vasta mayoría de las personas que vienen ilegalmente a Estados Unidos no son “malas personas”.
“No son criminales, no son MS 13, pero tampoco son personas que se asimilan fácilmente a Estados Unidos, a nuestra sociedad moderna. Son abrumadoramente rurales. Tiene educación de cuarto, quinto sexto grado. No hablan inglés (…) No se integran bien”, dijo.
Kelly defendió en ese sentido la decisión del Departamento de Justicia de aplicar una política de “tolerancia cero” contra inmigrantes que crucen ilegalmente la frontera, lo cual implica enjuiciarlos por acusaciones federales. “Las leyes son las leyes”, señaló.