Año tras año durante la temporada de lluvias, el mercado Poza Rica es uno de los centros de abastos más afectado; ciudadanos que intentan cubrirse de la lluvia e ingresan al interior del zoco, salen igual de mojados que en el exterior, ya que el techo del área no remodelada está completamente perforado y la pésima red pluvial que existe no funciona, por lo que los pasillos se inundan.
Las áreas de chiles y semillas del citado mercado, en donde se encuentran instalados por lo menos sesenta locales comerciales, es en donde se presentan con mayor frecuencia las inundaciones.
De acuerdo con los locatarios, las afectaciones recaen en los mismos comerciantes, quienes desechan sus desperdicios, principalmente grasas del área de fondas y de carnicerías, al drenaje sanitario, creando con ello un taponamiento que colapsa las redes.
Los pasillos se llenan de aguas negras durante las lluvias. Foto: Noreste.
Pero es la misma directiva de la Unión de Comerciantes del centro de abastos quien ha hecho oídos sordos a esta problemática, ya que hasta el momento no ha emprendido un programa de rehabilitación y mantenimiento al drenaje del sitio.
El mercado se convierte en un terrible foco de infección durante la temporada de lluvias, ya que de los registros brotan aguas negras y nauseabundas. Además de todo esto, varios ciudadanos han caído en los registros abiertos.