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Reforma/ Ernesto Sarabia

Durante abril-junio, el peso mexicano registró su peor resultado desde el tercer trimestre de 2011.

Con este resultado, el dólar acumuló una ganancia de 1.60 pesos en el periodo abril-junio, su mayor alza desde julio-septiembre del 2011, cuando avanzó 2.17 unidades.

Al mayoreo, el peso mexicano también tuvo su peor descalabro en casi 7 años.

El dólar interbancario cerró en 19.8730 pesos, 15.10 centavos más que ayer, con lo que acumuló una ganancia trimestral de 1.57 pesos, cifra sólo superada por los 2.173 pesos que obtuvo en el tercer trimestre de 2011.

Alfredo Coutiño, director para América Latina Moody’s Analytics, expuso que en el segundo trimestre la volatilidad del peso se debió a la incertidumbre generada por la imposición de aranceles a productos mexicanos y la desilusión por no llegar a un acuerdo en el TLC.

«El baile del peso tuvo menos que ver con el ambiente electoral y la delantera de Andrés Manuel López Obrador, por lo que los mercados empezaron a reconocer la probabilidad de que triunfe en las elecciones del 1 de julio», comentó.

El pasado martes, el director general de Operaciones y Sistemas de Pagos de Banxico, Jaime Cortina, dijo que no anticipa sobresaltos en los mercados o una depreciación del peso en caso de que el candidato de izquierda gane la Presidencia.

El mercado ya descontó con una alta probabilidad que ese equipo sea el que resulte ganador, añadió.

A pesar de que los mercados parecen haber aceptado la posible victoria de AMLO nada garantiza que el lunes los mercados abran con calma, expuso Coutiño.

Todo dependerá del tono y contenido del discurso del ganador la noche del domingo y de la efectividad que tenga el equipo económico para salir a dar respuestas al mercado el 2 de julio, añadió.

Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco Base, dijo que la depreciación del peso fue por un alza en las apuestas especulativas en contra de la moneda nacional, por el aplazamiento de la renegociación del TLC, aversión al riesgo por el endurecimiento de las políticas proteccionistas de EU y las amenazas de ese país a la Unión Europea y China.

También se derivó de la posibilidad de que la Fed suba su tasa de interés en cuatro ocasiones durante el año, el contagio de otras divisas de economías emergentes como el real brasileño y el rand sudafricano y el proceso electoral local, explicó Siller.

En tanto, el referencial Brent incrementó su precio 16.67 por ciento durante el trimestre que concluye y el West Texas Intermediate 15.79 por ciento. Hora de publicación: 18:58 hrs.