Cuando parecía que Japón, calificado a la segunda ronda, por Fair Play, daría otra sorpresa más, Roberto Martínez, técnico de Bélgica movió sus piezas, mandó a la cancha a Marouane Fellaini y Nacer Chadli, ambos anotaron, este en el último minuto, y los “Diablos Rojos” consiguieron una dramática y agónica voltereta por 3-2 y avanzaron a los cuartos de final de la Copa del Mundo de Rusia 2018.
Después de un primer tiempo, parejo y peleado, sin opciones claras de gol por parte de las dos selecciones, los japoneses sorprendieron y con goles de Genki Haraguchi en el 48 y Takashi Inui en el 52, se pusieron adelante 2-0. Los asiáticos que habían logrado colarse a los octavos de final, con los mismos puntos, goles a favor y en contra que Senegal, pero por tener dos tarjetas amarillas menos, se quedó a 20 minutos de echar a otro “grande”.
Inui celebra su tanto ante Bélgica. Foto: AP
La historia cambió cuando el estratega español, Roberto Martínez decidió realizar dos movimientos en el minuto 64: Fellaini por Mertens y Chadli por el portugués-hispano, Yanick Carrasco, que había gravitado por la banda derecha, sobre todo en el primer periodo del encuentro, disputado este lunes en el Estadio Rostov Arena de Rostov del Don.
Marcado, en ocasiones hasta por tres adversarios, el goleador belga, Romelu Lukaki, intentó una y otra vez meter a su equipo a la pelea, pero fue hasta el minuto 69, cuando después de una serie de rebotes, la pelota cayó en los dominios del defensa, Jan Vertonghen por el sector de la derecha, este quiso recentrar con la testa, pero en complicidad con el portero, Kawashima, el balón se metió hasta el fondo de las redes para el 2-1.
Cuatro minutos después, Eden Hazard, que galopó por derecha y por izquierda, envió su enésimo centro buscando a Lukaku y hasta a Kompany, que se iba con frecuencia al ataque, pero encontró la cabeza de Marouane Fellaini, que había ingresado minutos antes y sacó un remate que venció al portero oriental para el 2-2.
Witsel dispara de media distancia. Foto: AP
Hasta que se vio alcanzado, el estratega de la selección nipona, Akira Nishino, se decidió a modificar en el minuto 80, enviando un doble cambio: Hotaru Yamaguchi por Shibasaki y Keisuke Honda por Haraguchi, y el jugador de los Tuzos del Pachuca, puso en aprietos a la defensiva belga, primero con un disparo que rechazó Kompany, y un tiro libre en tiempo de reposición, que el guardameta Courtois envió a saque de esquina con ciertos apuros.
Y parecía que habría tiempos extra. Parecía que se repetiría el 2-2 entre estos dos equipos en la edición de Corea-Japón 2002; pero los Diablos Rojos, no dejaron de insistir, y si bien es cierto que Romelu Lukaki, con cuatro festejos en esta Copa del Mundo, uno menos que el líder de goleo, el inglés Harry Kane, no había podido anotar, hizo una jugada de fantasía, en el 90-4, para gol que significó el triunfo de su selección.
Vertonghen acercó de cabeza a Bélgica. Foto: AP
Luego de un saque de esquina a favor de Japón, Courtois, tomó la pelota, despejó en corto, para Vertonghen, este abrió para DeBruyne, quien corrió la milla por la banda derecha y a la altura del área grande envió un centro sobre el manchón penal, que Lukaki dejó pasar para la llegada en el segundo palo de Nacer Chadli, que sin marca, prácticamente solo dio el pase a la red para el 3-2, para la voltereta, para el boleto a los cuartos.
Después no hubo tiempo para más, y tras el silbatazo final, del árbitro senegalés Malang Diedhiou; mientras los japoneses se tiraron en el campo de juego lamentándose la forma en que perdieron, los belgas festejaron con todo, por repetir, por lo pronto lo realizado en la pasada edición de Brasil 2014, y ahora, primero, dar un paso más ante Brasil para igualar el cuarto lugar de México 1986 y, por qué no, pensar en el título.
Alineaciones:
Bélgica: Courtois, Alderweireld, Kompany, Vertonghen, Meunier, DeBruyne, Witsel, Yannick Carrasco, Mertens, Hazard y Romelu Lukaku.
Japón: Kawashima, Sakai, Yoshida, Shoji, Nagatomo, Hasebe, Shibasaki, Haraguchi, Kagawa, Inui y Osako.
Sígueme en Twitter: @oncetitular
