Al menos 133 personas resultaron afectadas hoy por una nube tóxica que avanzó sobre las localidades chilenas de Quintero y Puchuncaví, 170 kilómetros al noroeste de Santiago, denunciaron fuentes legislativas.
El senador oficialista Francisco Chahuán señaló a periodistas que decenas de menores de edad y adultos fueron ingresados a centros asistenciales con molestias diversas debido a una emanación industrial que obligó a las autoridades a decretar una “Alerta Amarilla” ambiental.
Las personas, en su mayoría menores de edad, presentaron náuseas, vómitos y desvanecimientos que fueron atendidos en centros asistenciales.
Ante esta situación, que también se presentó en menor medida el miércoles, las clases de la educación básica y secundaria en Quintero y Puchuncaví fueron suspendidas este jueves y viernes.
Las autoridades municipales determinaron que la nube tóxica, que tenía un olor putrefacto, contenía sustancias como nitrobenceno, cloroformo de metilo y tolueno, mientras que en el suelo se encontraron restos de un polvo amarillo que podría ser óxido de azufre.
Un grupo de jóvenes realizó este jueves una protesta en el acceso a Quintero para llamar la atención de las autoridades y pedir una pronta solución al daño ambiental en la zona, la cual es habitada por 90 mil personas.
El presidente Sebastián Piñera manifestó este jueves su preocupación por el episodio de contaminación y precisó que en las próximas horas se determinará a los responsables de la emisión de sustancias que afectó a la población.
“Puedo asegurar que vamos a investigar absolutamente, y no solamente vamos a investigar para sancionar a los que no han cumplido con la norma vigente, sino que también para mejorar nuestra norma”, dijo Piñera.
En Quintero y Puchuncaví existe un extenso parque industrial que integran una refinería de la estatal Corporación Nacional del Cobre (Codelco) y la generadora eléctrica AES Gener, entre otras.