En el caso del prófugo senador electo Noé Castañón hay un ingrediente de venganza política que pocos conocen: el chiapaneco se opuso al manejo de candidaturas que hizo el Partido Verde, y casualmente ahí empezó su desgracia. Castañón era suplente de Luis Eduardo Lozano quien renunció a la candidatura para cederle su lugar a Alejandra Lagunes. Sin embargo el INE rechazó la sustitución y quedó el suplente como candidato, pese a las agresiones del partido. Cuando Lozano vio que su suplente había ganado el escaño pidió ¡renunciasr a su renuncia!, lo que rechazó la autoridad electoral. Y luego a Castañón lo acusaron de violencia intrafamiliar. Lo comentan en»Templo Mayor» de Reforma. Foto de «Proceso».