El boxeador kazajo Gennady Golovkin intensificó este martes su guerra dialéctica contra su rival de los pesos medianos, el mexicano Saul Canelo Alvarez, y prometió «castigar» al azteca en su próxima revancha en Las Vegas.
El invicto rey del peso mediano mundial, Golovkin, se enfrentará con Alvarez en el T-Mobile Arena el próximo 15 de septiembre, un año después de que su primer encuentro terminara en un polémico empate muy disputado.
Una revancha planeada para mayo pasado fue cancelada al no superar Alvarez un control antidopaje, alegando que consumió carne contaminada en su México natal, tras dar positivo por el estimulante clembuterol.
Las relaciones entre los dos bandos han estado marcadas por la animosidad desde la prueba fallida de Alvarez, con Golovkin acusando a su rival de ser un tramposo por dopaje.
El entrenador de Álvarez, Chepo Reynoso, elevó la temperatura para la revancha esta semana después de describir a Golovkin como un «burro» fácil de superar.
«Golovkin es un burro que no piensa», dijo Reynoso. «No tiene un pensamiento. Es un hombre que da los mismos golpes. No hay mucho que tengamos que cambiar (en la pelea)».
Cuando le pidieron comentar sobre las declaraciones de Reynoso en una conferencia telefónica con reporteros este martes, Golovkin acusó a Álvarez de «carecer de clase».
«Ni siquiera quiero bajar a ese nivel. Simplemente muestra falta de clase, falta de educación, falta de inteligencia», añadió el kazajo.
«Simplemente muestra cómo se comporta. Nunca he dicho nada tan bajo sobre nadie», agregó Golovkin.
Los comentarios desde el campamento de Álvarez han dejado a Golovkin más decidido que nunca a retener sus títulos.
«Quiero castigarlo por todas las cosas malas que él y su equipo han hecho», dijo Golovkin.
El entrenador de Golovkin, el también mexicano Abel Sánchez, negó entretanto que su peleador estuviera «enojado» o se arriesgara a perder la compostura.
«Tiene un propósito en el gimnasio y también de lo que quiere hacer dentro del ring», dijo Sánchez.
“Canelo ha hecho algunas cosas que Golovkin siente que tiene que pagar, y lo hará en el ring», sentenció el preparador.